La dirección de la Compañía Nacional de Ópera (CNO), del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) continúa acéfala, luego de la renuncia de su titular, Alonso Escalante, desde el pasado 15 de septiembre.

Con las presentaciones en puerta de La Bohemia, de Giaccomo Puccini, esta semana en el Centro Nacional de las Artes, y Fidelio, de Ludwig van Beethoven, en el Palacio de Bellas Artes a principios de noviembre, el INBA todavía no informa sobre el relevo en esa compañía.

La semana pasada el titular de la Secretaría de Educación Pública, Alonso Lujambio, anunció la reapertura de la sala principal del Palacio de Bellas Artes.

El recinto, uno de los principales foros del género operístico en México, permaneció cerrado desde 2008, cuando comenzaron los trabajos de remozamiento del histórico inmueble.

Durante la gestión de Alonso Escalante al frente de la CNO, que se inició en enero de 2009, se montaron las óperas Don Giovanni, de Wolfgang Amadeus Mozart; Rigoletto, de Giuseppe Verdi; Carmen, de Georges Bizet –en la cual el elenco estuvo encabezado por Fernando de la Mora–, y Tata Vasco, de Miguel Bernal Jiménez.

El Teatro de la Ciudad Esperanza Iris fue el principal recinto alterno para las presentaciones de la Compañía Nacional de Ópera.