En el inicio de las sociedades modernas, la religión tenía un papel simbólico que daba cohesión y legitimidad de manera casi automática. Ya sea a través del miedo o de los acuerdos pacíficos, los sacerdotes tenían un papel incuestionado de autoridad moral, que por siglos facilitó las relaciones entre gobernantes y gobernados. El sociólogo alemán Niklas Luhmann hace un recorrido por los diversos significados de esta manifestación a lo largo de los siglos, y el sentido –incluso obligatorio– que le han dado a las estructuras sociales. Sociología de la religión, Niklas Luhmann. Herder-Universidad Iberoamericana, 288 pp. Precio de lista: 285 pesos.