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Ha vencido a varios mexicanos y me enoja

Cochulito quiere pelear contra Vic Darchinyan
 
Periódico La Jornada
Viernes 7 de mayo de 2010, p. a19

Mis metas son más altas que mi estatura, dijo resuelto el campeón gallo del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Fernando Cochulito Montiel, luego de recibir el cinto verde-dorado que lo acredita como tal.

Comentó que espera ser un monarca duradero y entre sus objetivos a cumplir está retar al armenio Vic Darchinyan, porque me cae mal y está muy feo para ser campeón.

De 1.62 metros de estatura, el originario de los Mochis, Sinaloa, dio la sorpresa el pasado 30 de abril cuando noqueó de forma categórica en el cuarto episodio y arrebató el cetro al japonés Hozumi Hasegawa, quien se había mantenido invicto desde 2001, con 25 combates, 11 de los cuales fueron exitosas defensas de la corona.

El Cochulito recordó que a los 13 años hizo un dibujo donde se veía como monarca del orbe en una contienda en Japón0y no imaginaba que al paso de 18 años lograría ese sueño que tuve de niño, por lo que agradeció a su familia haberlo apoyado.

La preparación a la que siempre se somete le ha servido para ganar antes del límite los tres cetros mundiales de su carrera: mosca, supermosca y ahora el gallo.

Desde el piso 51 de la Torre Mayor de esta ciudad, el carismático boxeador, con una hoja de servicios de 41 triunfos; 31 antes del límite, dos reveses e igual número de empates, se mostró de buen humor.

Insistió en que quiere contender contra el euroasiático Darchinyan, apodado el Toro Salvaje, monarca supermosca del CMB, porque le molesta que le haya ganado a varios mexicanos y porque se siente seguro de vencerlo, ya que cuando me le quedé viendo a los ojos, bajó la mirada; en pocas palabras, es un asunto personal.

Aunque su abanico de posibilidades es más amplio, pues se considera una pelea ante el monarca del orbe de los supermosca de la AMB y FIB, el filipino Nonito Donaire, o la eventual revancha ante el ex campeón Nishioka.

Su promotor Fernando Beltrán estuvo presente en la reunión y se mostró complacido por la hazaña lograda en Japón, pese a que el Cochulito tenía todo en contra, pero se impuso en la tierra del ahora ex monarca.