El Instituto Nacional para el Desarrollo de Capacidades del Sector Rural (Inca Rural) cierra sus puertas luego de 38 años de apoyar a los campesinos del país.

Ada García Cortés, dirigente del sindicato de trabajadores del organismo, informó que el pasado 5 de octubre el titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), Francisco Mayorga Castañeda, confirmó que los trabajadores serán liquidados. La situación es muy difícil, pues si a sindicatos como al de electricistas (SME) y al de petroleros los están golpeando, nosotros ¿qué podemos esperar?.

Los 57 trabajadores del Inca Rural ayudaban a los campesinos a mejorar los procesos productivos, comerciales y de organización para conformar pequeñas empresas y lograr insertarse en las cadenas productivas, y con ello acceder a mejores condiciones de ingreso y vida.

Desde hace cinco años el organismo dependiente de Sagarpa, pero además asociación civil –factor que le permitió permanecer durante poco más de tres décadas– tuvo un presupuesto de 34.5 millones de pesos. Para continuar apoyando a los productores se firmaron acuerdos con la Comisión Nacional de Pesca, Sagarpa y otras instituciones involucradas con el sector rural, agregó García Cortés.

Añadió que pese a las constantes presiones para eliminar al Inca Rural, los pocos servidores públicos lograron una cobertura en 15 estados. En diciembre cerrarán definitivamente las puertas de las cinco delegaciones localizadas estratégicamente para dar cobertura a los 32 estados del país.

García Cortés explicó que los prestadores de servicios tenían que saber generar procesos de participación, facilidades para capacitar a los adultos del medio rural, generar procesos de visión empresarial entre los productores, habilidad para el manejo de conflictos y saber planear y evaluar los procesos.

Campesinos sin tecnologia

De su lado, el Frente Nacional de Legisladores del Sector Rural asentó que 76 por ciento de los 25 millones de campesinos no accede a la tecnología y viven con grandes rezagos y sólo 6 por ciento está altamente tecnificado.

Heladio Ramírez, presidente de dicho frente, sostuvo que no es exagerado decir que el sector rural y sus actividades económicas son los más golpeados por las crisis económica, financiera y alimentaria, pues más de 30 mil núcleos agrarios viven en una situación muy precaria y con grandes rezagos respecto a la evolución general de la economía.