El montaje de Abraham Oceransky, colofón
de las actividades en Veracruz
Las pirañas... reivindicó la tragedia
argüeliana
CARLOS PAUL ENVIADO
Jalapa, Ver., 1o. de diciembre. Con el afán
de destacar ''la tragedia de la gente popular sin perder el estilo argüeliano'',
el creador escénico Abraham Oceransky adaptó el guión
de Las pirañas aman en cuaresma, de Hugo Argüelles,
obra con la que concluyó la 23 versión de la Muestra Nacional
de Teatro.
Argüelles
-comenta Oceransky- ''me dijo que no había estado muy contento con
la versión cinematográfica, por lo que al realizar la adaptación
me recomendó que el texto no perdiera su carácter trágico.
En la puesta en escena traté de que la relación fuera más
humana entre las dos mujeres protagonistas que en su carácter de
mujeres depredadoras, animales olvidados; es lógico que quieran
vengarse de la sociedad''.
La historia de Las pirañas aman en cuaresma
relata cómo Eulalia y Aminta, en un apartado lugar de pescadores,
son señaladas de asesinar a Lucio, esposo y padre, y como afecta
sus vidas la llegada de la ciudad de Raúl, joven pintor quien trata
de ''descubrir tanto la carne como el corazón de las pirañas''.
''Es un montaje en el que no se daña la condición
de las mujeres, al contrario, ellas triunfan", explica Oceransky, quien
encabeza la agrupación Teatro Estudio T y como dramaturgo ha escrito
16 obras más 10 adaptaciones, aunque hasta el momento sólo
ha sido publicada Muñecas de seda, en 1997.
Argüelles se distingue por trabajar de manera estrecha
con los directores que montan sus obras; sin embargo, por su estado de
salud ''me soltó la obra y me tuvo confianza. Con su permiso hice
algunas variaciones; por ejemplo, eliminé lo que consideré
superficial y folclórico, como el encanto de los pescadores, para
que la obra fuera más íntima".
Con la actuación de Gabriela Núñez,
Waldo Hernández, Liliana Hernández, Olinka Velásquez,
Enrique Ceja, Luis Díaz, Marie Pierre Girardeau, Angélica
Luzzi y la música en vivo a cargo de Ramón Gutiérrez,
jaranero que interpreta "desde música negra antigua hasta blues'',
anoche las pirañas volvieron a nadar en escena.