El argentino Walter Silvani, anotador del solitario gol

Pachuca ganó la Copa de Campeones Concacaf al imponerse 1-0 a Morelia

AGENCIAS

Pachuca se coronó por primera vez con un título internacional, el campeonato de clubes de la Confederación de Futbol del área norte, centroamericana y del Caribe, al vencer anoche a Morelia por único gol del argentino Walter Cuqui Silvani, en el estadio Azul.

Ante la ausencia del presidente y vicepresidente de la confederación regional, Jack Warner y Chuck Blazer, un representante del organismo, Rafael Salguero, fue enviado a hacer entrega del trofeo plateado por el que equipos mexicanos se han encontrado en finales en 19 ocasiones, y esta era la primera para Tuzos.

Pachuca, dirigido desde la banca por Alfredo Tena, ayudado de asistentes porque afónico no pudo hacerlo de forma personal, se mostraron determinantes al ataque frente a la exitosa escuadra que conduce el argentino Rubén Omar Romano, ayer neutralizada.

No obstante un par de aproximaciones tempraneras de Monarcas, el cuadro hidalguense salió mejor ordenado al terreno de juego y generó las mejores opciones de gol durante el primer encuentro con una gran lucha en el medio campo y se diluyó con balones que se escurrieron con insistencia por la banda derecha de Tuzos.

Morelia sólo tuvo una oportunidad clara, con la que habría abierto el marcador en el minuto 18 por conducto de Mario Ruiz, quien mandó un servicio por el costado derecho a Adolfo Bautista.

Sin embargo, el disparo de éste fue atajado con certeza por el arquero colombiano Miguel Calero, y después alejado en definitiva por Alfonso Sosa ante el peligro de un remate del brasileño Fernandes.

El tanto se registró apenas iniciado el complemento, en el minuto 47, cuando Cesáreo Victorino devolvió una pared a Silvani, quien ante el descuido del defensa Omar Trujillo y la salida del portero suplente Miguel de Jesús Fuentes, punteó el balón para vencerlo pegado al poste derecho.

Aunque ahora tiene el título, Pachuca deberá aguardar las disposiciones internacionales para jugar o no por el título mundial de clubes, cuyo campeonato está aplazado indefinidamente, y por el momento, la zona marginada de esa justa.