La macrocuenta nacional de oferta y demanda final de bienes y servicios –que totaliza los componentes fundamentales de la economía real– indica una sustancial recuperación en ambos agregados (oferta y demanda) de 7.1% en 2021, crecimiento relevante que, sin embargo, resultó insuficiente para recuperar totalmente las contracciones de -0.3 en 2019 y -9.7 en 2020 (Gráfico 1).

La oferta total (y la demanda) ascendieron en 2021 a 37.205 billones de pesos corrientes, cifra a la que la producción interna (PIB) sólo aportó 70.5% (72.7 en 2020) y los bienes y servicios importados 29.5% (27.3 en 2020). El PIB creció, como es sabido, 4.8% en el año y las importaciones (oferta externa) 13.7%.

A precios constantes (descontando la inflación) de 2013, la oferta y la demanda totalizaron 24.508 billones de pesos, cifra muy cercana al valor real de 2017 (24.607 b) (Gráfico 2). Así mismo, a precios constantes el PIB fue de 17.790 billones en 2021, un nivel equiparable al registrado en 2016 (17.747 b) (Gráfico 3).

La demanda total por su parte, se integró en 2021 en la siguiente forma: consumo interno total 53.9%, inversión fija (formación bruta de capital fijo, que se analizará en el siguiente Reporte 2/2) 14.0%, exportaciones de bienes y servicios 28.5%, y variación de existencias 0.3% (más una discrepancia estadística de 3.4%) (Gráfico 1). En el año, el consumo creció 6.4%, la inversión fija 10.0, y las exportaciones (demanda externa) sólo 6.9%

A precios constantes, el consumo total sumó 14.204 billones de pesos (de 2013), cifra equiparable a los 14.282 billones de pesos de 2017 (Gráfico 4).

El consumo total ascendió en 2021 a 20.039 billones de pesos corrientes (6.4% más en términos reales sobre 2020). De esta cifra, el consumo privado representó 84.5% y el gubernamental 15.5%, estructura prácticamente estática en los últimos 13 años, no obstante que el consumo privado se recuperó 7.4% en el año (tras una caída de -10.5% en 2020) y que el consumo gubernamental sólo creció 1.0% (0.1% en 2020) (Gráfico 5).

En el consumo privado (de las familias) el de bienes nacionales creció 6.7% (-7.7 en 2020) y el de servicios nacionales 6.2% (-13.8 en 2020), mientras que el consumo de bienes importados aumentó 23.3% y el de servicios 36.6%. Así, no se ha logrado romper la inercia de pérdida de mercado nacional frente a las importaciones. Un cuarto de siglo atrás, recién inaugurado el TLCAN, la participación de origen nacional en el consumo privado era de 96.2%, y en 2021 ya es sólo del 87.6%. Elementos clave en la suficiencia interna son los energéticos (con una expectativa real de autoabasto en curso), los alimentos básicos con avances insuficientes, y los servicios.

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