Las personas de menores ingresos que cuentan con un crédito bancario ahora tienen que destinar una mayor cantidad de recursos al pago de sus deudas, reveló el Banco de México (BdeM).
Según el último reporte de estabilidad financiera del banco central, con datos hasta septiembre la posición financiera de los hogares mexicanos se redujo, pues pasó de 45 por ciento del PIB a 42 por ciento.
Si bien, detalló el organismo, la posición financiera medida en pesos creció ligeramente, el PIB se acrecentó más rápidamente, de ahí la caída reportada en la posición.
Según el BdeM, los niveles de apalancamiento de los hogares han permanecido estables hasta el cierre del tercer trimestre del año. Por un lado, los saldos de la deuda total de los acreditados, a precios constantes, se han mantenido en los mismos niveles.
Y por otro lado, el apalancamiento como proporción del ingreso mensual destinado al pago de la deuda a septiembre de 2021 se ha mantenido, en general, en porcentajes similares a los de un año atrás.
“No obstante, presentaron ligeros incrementos para los acreditados de menor ingreso, quienes destinan un mayor porcentaje de su ingreso al pago de sus deudas”, explicó el banco central.
Precisó que el crédito al consumo otorgado por la banca y sus subsidiarias continuó disminuyendo, aunque a un menor ritmo de contracción anual entre marzo de 2021 y septiembre de 2021, en prácticamente todos sus segmentos de cartera, excluyendo el financiamiento automotriz, donde la tendencia de contracción se mantuvo.
“Este comportamiento puede asociarse al mayor nivel de actividad económica del periodo y a la tendencia negativa que han presentado las ventas al menudeo de vehículos ligeros, relacionado en parte a las afectaciones al sector derivadas de la escasez de semiconductores”, apuntó.
Asimismo, destacó, a septiembre continúa el aumento observado desde inicios de la pandemia en la participación del saldo de los acreditados “totaleros”, es decir, aquellos que liquidan el total de su saldo exigible al final del periodo.
“La carga financiera de los acreditados de la banca con préstamos al consumo registró un ligero desplazamiento hacia menores niveles en sus principales segmentos de agosto de 2020 a agosto de 2021. Estas tendencias reflejan un comportamiento precautorio por parte de los hogares al reducir su endeudamiento en el año pasado, lo que implicaría en la actualidad una menor vulnerabilidad en el pago de los acreditados de estos segmentos ante posibles afectaciones en sus ingresos”, advirtió el BdeM.
Respecto a la morosidad, el banco central indicó que los niveles han bajado en los diferentes segmentos del crédito al consumo en los pasados seis meses tras haber alcanzado a principios de 2021 los niveles más altos de los cinco años recientes.
“La reducción en la morosidad se explica por el decremento en la cartera vencida debido a un traspaso menor de la cartera vigente a cartera vencida y por mayores niveles de quebrantos. No obstante, destaca el nivel de la cartera vencida de préstamos personales, el cual continúa siendo el segmento con mayor alza”, enfatizó.
El organismo resaltó que si se incorporan los quebrantos al indicador de la morosidad a través de ese indicador ajustado, se observa que para la mayoría de las carteras sus niveles de atrasos a septiembre de 2021 siguen siendo ligeramente superiores a los niveles anteriores a la pandemia.
“Hacia adelante, será importante continuar vigilando el comportamiento de la cartera en el contexto de las condiciones prevalecientes ante la pandemia y la evolución de la reactivación económica”, planteó el BdeM.