El colectivo Cambiemos el sistema no el clima, formado por ambientalistas y académicos, expresó su rechazo a los grandes corporativos trasnacionales que se apropian de las energía limpias “como una gran salida” en la lucha contra el cambio climático, ya que tecnologías como la creación de parques eólicos ocasionan prácticas sucias globales.
En un pronunciamiento por el Día Mundial del Medio Ambiente, la organización indicó que los contratos de grandes eólicas solares “no sólo tienen un impacto muy despreciable sobre el tema climático y ambiental”, sino también consecuencias sociales, culturales y políticas, porque “nacieron bajo la corrupción, como la reforma energética en México, que se impulsó con el pago a legisladores para que la aprobaran”.
Esa legislación, señaló la organización que impulsa la declaratoria de una emergencia climática nacional, tuvo dos vertientes.
La primera, dar la entrada a la tecnología del fracking (facturación hidráulica para extraer gas y petróleo del subsuelo), que es “reconocer la entrada en la era del petróleo no convencional”, y, en segundo lugar, proporcionar apoyo a este tipo de soluciones frente al tema climático de las energías limpias.
Así, Cambiemos el sistema no el clima, respaldó la decisión de la presente administración federal de cancelar los contratos firmados “en el sexenio de Peña Nieto para apoyar las energías renovables, que supuestamente deben llevar a cabo grandes corporativos españoles que tienen fama de ser empresas muy corruptas”.
Por otro lado, destacaron que en el aspecto climático, Estados Unidos tiene un papel fundamental. Afirmaron que “siempre ha saboteado toda la labor que se ha desarrollado en la materia y ha tratado de imponer falsas soluciones al cambio climático”.
Con esta posición, “mientras no modifique su política, ese país será el mayor obstáculo para avanzar en la lucha contra el cambio climático”.