En el contexto del Día del Maestro, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) y la Dimensión de Pastoral Educativa y de Cultura del organismo religioso reconocieron la labor de los docentes, sobre todo en tiempo de pandemia, e hicieron un llamado para que sean “escuchados, acompañados y capacitados”.
Rogelio Cabrera López, arzobispo de Monterrey y presidente de la CEM, y Alfonso Miranda Guardiola, obispo auxiliar de la misma ciudad y secretario general del episcopado, señalaron que la pandemia del Covid-19 ha significado un “enorme desafío para continuar con el aprendizaje” y exhortaron a los docentes a “seguir ampliando los caminos de comunicación con lospadres y madres de familia, con los directivos y, sobre todo, con los estudiantes”.
Consideraron que las presentes circunstancias han “profundizado, una vez más, la enorme brecha de desigualdad que existe en cuanto a personal, instalaciones y herramientas tecnológicas suficientes para la labor educativa”, por lo que es “crucial que todos colaboremos para dignificar las condiciones del ámbito educativo nacional”.