El gobierno de Estados Unidos tiene clara la necesidad de trabajar de manera conjunta con México para atender las causas de la migración irregular en la región y, con ello, evitar una crisis en su frontera sur.

La administración de Joe Biden promoverá el comercio y la inversión con su vecino del sur, con base en el T-MEC; así como mejorar la cooperación en lo referente a la seguridad.

A la vez, respeta la soberanía de México en la discusión de la reforma energética del presidente Andrés Manuel López Obrador, aunque confía en que exista transparencia en este proceso para dar certeza a los inversionistas.

Así lo informó este miércoles en conferencia de prensa virtual Jon Piechowski, subsecretario de Estado adjunto de la Oficina del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado, donde hizo un balance de los recientes encuentros virtuales entre los presidentes Andrés Manuel López Obrador y Joe Biden, y los cancilleres Marcelo Ebrard y Antony Blinken.

“Estados Unidos se compromete a trabajar junto con México para implementar un enfoque integral de la migración irregular regional que incluya abordar las causas fundamentales de ésta”.

Apuntó que en la declaración conjunta México-Estados Unidos –tras el encuentro de los mandatarios— se delineó el compromiso bilateral para trabajar en políticas migratorias que reconozcan la dignidad de las personas en movilidad; atender las causas de la migración; desarrollar vías legales para una migración segura, ordenada y regular; y garantizar el derecho al asilo.

Para esto, dijo el funcionario estadunidense, el gobierno de Biden no sólo trabajará con los gobiernos de la región, sino con organizaciones internacionales humanitarias, grupos de la sociedad civil y el sector privado. “Gracias a la cooperación con México, con los países de Centroamérica y de otros lugares, podemos ayudar a restaurar la esperanza de las personas para que puedan prosperar en casa”.

Destacó el giro que el presidente Biden ha dado a las políticas en materia migratoria de su antecesor Donald Trump, como poner fin al programa Quédate en México, oficialmente llamado Protocolo de Protección a Migrantes, con lo que se están procesando los 25 mil casos pendientes de asilo.

Con estas nuevas políticas, “Estados Unidos reconoce que quienes están haciendo este arduo viaje y dejando atrás a sus familias, realmente sienten cierta desesperación. Creo que tendremos más anuncios en el futuro”.

Interrogado en torno a la reforma eléctrica del presidente López Obrador –que está a un paso de ser aprobada—, Piechowski refirió: “Hemos escuchado preocupaciones en el sector privado, y al mismo tiempo respetamos la soberanía de México para promulgar sus leyes. La transparencia es muy importante para los inversionistas. Hemos tenido conversaciones con todos los niveles de México, transmitiendo lo que sabemos. Esperamos continuar con la cooperación y las discusiones entre los sectores donde nuestras economías están conectadas”.

Enfatizó que la cooperación binacional en materia de seguridad es fuerte debido a que ambos países comprenden los desafíos que enfrentan por la operación de loas organizaciones criminales transnacionales que, entre otros negocios ilícitos, trafican drogas en la frontera común.

“Estamos dedicados a trabajar con México para garantizar que nuestra cooperación en seguridad siga siendo sólida, que esté arraigada en los desafíos y las amenazas compartidas que enfrentamos. Y al mismo tiempo, respetamos absolutamente la soberanía de México y entendemos su deseo de controlar su lado de la frontera. Trabajaremos en el futuro para asegurarnos de que nuestra cooperación sea sólida para que podamos hacer que nuestros países, nuestras calles, sean más seguros para nuestros ciudadanos”.