El volumen total de crudo exportado por Petróleos Mexicanos (Pemex) tuvo en febrero una marginal disminución de 0.9 por ciento respecto al mismo mes del año previo, en el contexto que la empresa se prepara para aumentar los niveles de producción de combustibles en el sistema nacional de refinación con la entrada en operación de la Refinería Olmeca, en Dos Bocas, Tabasco.

De acuerdo con cifras actualizadas por la firma petrolera, en el segundo mes del año exportó un promedio de 940 mil barriles diarios de petróleo crudo, mientras que, en febrero de 2023, fueron 949 mil barriles diarios.

Las estadísticas muestran que el nivel de exportación de crudo es 1.6 por ciento superior al reportado en febrero de 2022, cuando la cifra ascendía a 925 mil barriles diarios.

El actual nivel de exportación se encuentra 6.4 por ciento por encima del más bajo reportado a lo largo de todo el año pasado, en noviembre, cuando promedió 883 mil barriles diarios.

El volumen de exportación del crudo Maya promedió en febrero 508 mil barriles diarios, lo que implicó una disminución de 17.6 por ciento respecto a los 617 mil barriles diarios reportados en el mismo mes del año previo.

Se trata de la variedad de crudo que más se manda al extranjero por parte de Pemex con poco más de la mitad de las exportaciones totales. De forma específica, en febrero representó el 54 por ciento.

El martes se dio a conocer que Pemex solicitó a su unidad comercial recortar en 436 mil barriles diarios las exportaciones de crudo, medida tomada para hacer frente a la entrada en operaciones de la Refinería Olmeca que necesita el crudo suficiente para la elaboración de combustibles.

El especialista del sector energético, Arturo Carranza, consideró que la cancelación hasta de 436 mil barriles diarios de petróleo crudo para exportación debe entenderse como una decisión lógica y secuencial que esta administración debe tomar para acercarse a la autosuficiencia energética.

Tras la construcción de Dos Bocas y el cada vez más cercano inicio de operaciones de esta nueva refinería, el siguiente paso es restructurar la estrategia comercial de Pemex para reducir gradual y progresivamente las exportaciones e incrementar, en la misma medida, la carga de petróleo crudo que le inyecta a sus refinerías, apuntó.

El giro en la estrategia comercial de Pemex implica desprenderse de una buena oportunidad relacionada con la posibilidad de incrementar los ingresos petroleros por la vía de exportaciones.