Mundo
Ver día anteriorSábado 27 de mayo de 2023Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

EU vive crisis de muertes por sobredosis

La DEA revoca licencia a una distribuidora de fármacos opioides

Morris & Dickson no reportó miles de pedidos sospechosos

 
Periódico La Jornada
Sábado 27 de mayo de 2023, p. 18

Washington. La Administración de Control de Drogas de Estados Unidos retiró ayer la licencia para vender analgésicos altamente adictivos a uno de los mayores distribuidores de fármacos del país tras determinar que no había reportado miles de pedidos sospechosos en plena crisis de los opiáceos.

La medida contra la mayorista farmacéutica Morris & Dickson Co., que amenaza con llevarla a la quiebra, se tomó dos días después de que la agencia noticiosa Ap publicó un reportaje de investigación que describió cómo la agencia antidrogas (DEA, por sus siglas en inglés) permitió que la compañía siguiera distribuyendo medicamentos durante casi cuatro años después de que un juez recomendara aplicarle la pena más severa por su indiferencia negligente hacia las reglas destinadas a prevenir el abuso de opioides.

La DEA reconoció que el tiempo que tardó en emitir su decisión final fue más largo de lo normal para la agencia, pero culpó en parte a Morris & Dickson por retrasar el proceso al buscar demoras debido a la pandemia de covid-19 y su larga búsqueda de un acuerdo que la agencia indicó que había contemplado. La orden entrará en vigor en 90 días, lo que permitirá más tiempo para negociar un acuerdo.

Irregular desde 2014

La directora de esta agencia, Anne Milgram, escribió en la orden de 68 páginas que Morris & Dickson no aceptó la responsabilidad total por sus acciones, que incluyeron el envío de 12 mil pedidos inusualmente grandes de opioides a farmacias y hospitales entre 2014 y 2018. Durante este tiempo, la compañía sólo informó a la DEA de tres pedidos sospechosos.

Milgram citó específicamente el testimonio del entonces presidente de la compañía en 2019, Paul Dickson, de que su programa de cumplimiento era muy bueno y que no creía que ni una persona haya resultado dañada por (sus) fármacos.

Esas declaraciones del directivo de una firma operada por una familia propietaria pierden el sentido de los requisitos de un solicitante de registro ante la DEA, escribió la funcionaria.

La no aceptación de responsabilidad mostró que ni él ni sus directores entienden el alcance total de su conducta indebida, así como el daño potencial que causó.

Morris & Dickson, con sede en Shreveport, Luisiana, tiene sus raíces en 1840, cuando su fundador homónimo llegó de Gales y puso un anuncio de venta de medicamentos en un periódico local. Desde entonces se ha convertido en el cuarto distribuidor mayorista de fármacos del país, con ingresos anuales estimados en 4 mil millones de dólares, con casi 600 empleados que atienden a farmacias y hospitales de 29 estados.