El gobierno de México depositó ayer ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) el instrumento de ratificación del Convenio 190 contra la violencia y el acoso laboral, con la finalidad de prevenir y eliminar esta problemática.

El país se convirtió de este modo en el decimonoveno Estado miembro de la OIT y séptimo en la región de las Américas en ratificar este tratado internacional, mismo que el Senado aprobó en marzo pasado.

Junto con la Recomendación 206, el Convenio 190 proporciona un marco común para la acción y constituye una oportunidad única para forjar un futuro del trabajo basado en la dignidad y el respeto, y pone de manifiesto el derecho de todas las personas a un mundo sin violencia y acoso, enfatizó la OIT.

Ambos instrumentos, resaltó, serán clave para alcanzar los objetivos establecidos por la Declaración del Centenario sobre el Futuro del Trabajo –adoptada en 2019–, en especial, la aspiración a construir un mundo laboral libre de violencia y acoso.

La entrega formal del Convenio 190 fue realizada la mañana de ayer por la subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la cancillería mexicana, Martha Delgado.

En la ceremonia en Ginebra, Suiza, Delgado reconoció que la ratificación del convenio por parte de México constituye el reconocimiento de que la violencia y el acoso tienen un profundo impacto en la integridad física y mental de las personas, deterioran el ambiente de trabajo y la productividad, y tienen serias consecuencias para la familia y la comunidad.

La violencia es una clara violación de los derechos humanos y no debe ser tolerada o permitida en nin-guna circunstancia. Reconocemos que la agresión y la discriminación, incluidas aquellas por razón de gé-nero, son retos en mi país y en todo el mundo. Nuestra presencia aquí hoy es una llamada a todos para la eliminación de dichas prácticas.

La funcionaria enfatizó que el Convenio 190 tiene un marco global sin precedentes que ofrece una perspectiva interseccional y transversal, así como herramientas para reducir y eliminar la violencia que afecta a tantos trabajadores.

Una vez que el Convenio 190 fue depositado ante la OIT por las autoridades mexicanas, entrará en vigor un año después, tras lo cual adquirirá carácter de ley en el país. Hasta la fecha, México ha ratificado 81 convenios, 64 están vigentes.

En representación del director general de la OIT, Guy Ryder, Martha Elizabeth Newton, directora general adjunta de Políticas de la OIT, recordó que los instrumentos mencionados ofrecen protección para todos en el mundo del trabajo, e incluyen, pero no se limitan, a la erradicación de la violencia y el acoso por razón de género.