Los productores enfrentan incertidumbre sobre la evolución de los precios del café, ante el aumento en fertilizantes y otros insumos, como la gasolina, y requieren precios no menores a 4 mil pesos por quintal de pergamino para recuperar los costos de producción, planteó la Coordinadora Nacional de Organizaciones Cafetaleras (CNOC).

Después de varios años de bajos precios, los caficultores necesitan que sean mejores en la siguiente cosecha e iniciar una recuperación de la producción en el país, planteó. Desde febrero hay un fuerte descenso en los precios del café en la bolsa de Nueva York debido a factores como los cierres en China por el covid-19, el aumento en los precios de la gasolina y el alza en las tasas de interés de Estados Unidos.

Las expectativas por el clima en Brasil, el principal productor del aromático, y la devaluación del peso ante el dólar de la semana pasada provocó mejoría en los precios del quintal de pergamino pagado a los productores, indicó.

La CNOC explicó que durante las últimas décadas los pequeños productores de café, campesinos e indígenas han hecho un gran esfuerzo por mantener las cosechas, pese a muchos años de precios bajos y las afectaciones por la plaga de la roya.

Advirtió que en años recientes las corporaciones trasnacionales controlan buena parte del consumo y la comercialización del café mexicano. La Nestlé, que utilizaba los desmanches y los cafés de menor calidad, pasó después a importar cafés robusta de menor precio y calidad, y con la excesiva mezcla con endulzantes y saborizantes artificiales siguen distorsionando el consumo de café.

Agregó que esta empresa, AMSA y California, entre otras compañías nacionales, han impuesto un esquema de comercialización del café mexicano que afecta a los productores, se gasta más en comercialización y se vende a precios menores que en otros países.

En la cosecha 2021-22 realizaron con total impunidad mayores castigos a los precios pagados a los productores y fue evidente la gran influencia que tienen al no intervenir el gobierno estatal ni federal en favor de los productores afectados.