Pekín. China manifestó ayer su categórico rechazo a la invitación hecha por Estados Unidos a las autoridades de Taiwán para que participen en la llamada Cumbre por la Democracia, indicó Zhao Lijian, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, quien reiteró que quienes intenten contener a Pekín con la cuestión de esa isla están jugando con fuego y se van a quemar.

Zhao insistió en que existe una sola China y su gobierno es la única autoridad legal que representa a la totalidad del país. Taiwán es parte inalienable del territorio, aseveró.

“Instamos a Estados Unidos a respetar el principio de una sola China y las disposiciones pertinentes de los tres comunicados conjuntos existentes, y a que deje de proporcionar cualquier apoyo a las fuerzas a favor de la ‘independencia de Taiwán’”, dijo Zhao.

Agregó que jugar con fuego cuando se trata de Taiwán, eventualmente atraerá las llamas a Estados Unidos.

En tanto, Zhu Fenglian, portavoz de la Oficina de Asuntos de Taiwán del Consejo de Estado, advirtió que las acciones de fuerzas contra China son en extremo peligrosas.

La portavoz declaró lo anterior en referencia al punto de vista de algunos académicos de Taiwán, acerca de que Lituania había sido incitada por Estados Unidos y las autoridades del Partido Progresista Democrático (PPD) en Taiwán a desafiar el principio de una sola China, lo que llevó a Pekín a degradar sus relaciones diplomáticas con Lituania al nivel de encargado de negocios.

Si las fuerzas separatistas de Taiwán nos provocan o incluso cruzan la línea roja, nos veremos obligados a tomar medidas, advirtió Zhu.

Moscú, por otra parte, consideró que Estados Unidos provoca la división en el mundo con la Cumbre por la Democracia sin la participación de Rusia y China, de acuerdo con el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.

Desde luego tenemos una actitud negativa a ese encuentro, que no es más que un intento de establecer nuevas líneas divisorias. A principios de los años 90 nos esforzamos por eliminarlas, pero ahora, Estados Unidos prefiere crear más y dividir a los países en buenos, a su juicio, y malos, también a su juicio, comentó Peskov.