Una delegación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) se encuentra en visita de trabajo en México, a razón de los siete años de la desaparición en Iguala, Guerrero, de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa.

La visita de la delegación de la CIDH ocurre en el contexto de la medida cautelar 409/14, y a través del Mecanismo Especial de Seguimiento al asunto Ayotzinapa, desde la cual brinda cooperación y asesoría técnica a la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia en el caso Ayotzinapa (Covaj), la cual fue creada mediante decreto presidencial publicado el 4 de diciembre de 2018, informó ayer la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

La cancillería agregó que “esta visita se inserta dentro de la política exterior en materia de derechos humanos; uno de los pilares esenciales es la colaboración y el diálogo con los organismos internacionales en este rubro.

Asimismo, la visita reafirma el compromiso claro con el cumplimiento del derecho humano a la verdad, en su doble dimensión.

La primera, indicó la SRE, consiste en el derecho de las víctimas y sus familiares a conocer la verdad respecto a los hechos que dieron lugar a graves violaciones de garantías individuales, así como a conocer la identidad de quienes participaron. La segunda se refiere al derecho de la sociedad a conocer la verdad de lo ocurrido, así como las razones y circunstancias en las que esos actos se cometieron.

De acuerdo con un tuit de la CIDH, la comisionada Esmeralda Arosemena de Troitiño y la secretaria ejecutiva, Tania Reneaum Panzi, estuvieron ayer en el encuentro sobre el caso encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador en Palacio Nacional.

Además, la delegación sostendrá reuniones con el titular de la Unidad Especial de Investigación y Litigación para el caso Ayotzinapa, de la Fiscalía General de la República, Omar Gómez Trejo, así como con representantes del Poder Judicial de la Federación, de la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas y con personal de la SRE.

La delegación de la CIDH está integrada por la relatora Esmeralda Arosemena; la secretaria ejecutiva, Tania Reneaumi; la secretaria ejecutiva adjunta, María Claudio Pulido, y la coordinadora de Monitoreo para México, Fiorela Melzi.

Asimismo, la CIDH y la Oficina en México del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) llamaron al gobierno federal a redoblar esfuerzos en la recuperación de pruebas y nuevos testimonios relevantes.

Consideraron fundamental continuar priorizando la búsqueda de los estudiantes cuyo paradero aún se desconoce, así como avanzar con la investigación del caso y su esclarecimiento de manera pronta y efectiva.

En un pronunciamiento, indicaron que resulta de suma importancia transformar los avances logrados en acciones concretas que tengan como objetivo romper el pacto de silencio y los obstáculos para conocer la verdad de lo ocurrido.

Subrayaron que es prioritario cumplir con las consignaciones y órdenes de aprehensión y extradición pendientes; impedir filtraciones de información; sancionar al funcionariado que obstaculizó la justicia y cometió violaciones a derechos durante la investigación, y que se aceleren las entregas de datos de las instituciones de seguridad e inteligencia aún pendientes.

Los organismos internacionales señalaron que a partir del trabajo articulado hoy se conoce nueva información sobre el contexto y la dimensión del ataque ocurrido y las múltiples violaciones a derechos humanos que resultaron de ello.

Enfatizaron que se derribó la fabricación de una versión de los hechos que menoscabó las obligaciones internacionales del Estado.