Opinión
Ver día anteriorMiércoles 30 de junio de 2021Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 
Covid-19: señales de alerta
E

l mundo asiste a un nuevo repunte en la transmisión del Covid-19, el cual preocupa a los especialistas por concentrarse en la llamada variante delta, más contagiosa, y para la cual las vacunas existentes parecen tener una menor eficacia.

La nueva ola pandémica enciende alarmas en todas las latitudes: en Australia, 10 millones de personas recibieron la orden de cumplir un confinamiento de al menos tres días en varias ciudades del país; en Rusia, se encuentran ocupadas 151 mil de las 182 mil camas ocupadas, y el rápido incremento en el número de enfermos hace temer un colapso del sistema sanitario; mientras, en España un viaje estudiantil derivó en un brote con cientos de personas infectadas y miles aisladas en siete regiones del país.

México, que había logrado una sostenida disminución en los contagios mientras otras regiones lidiaban con la tercera ola de la enfermedad, encara ahora un preocupante incremento de nuevos casos: las últimas tres semanas han sido de aumento constante, con 0.5 por ciento en la semana epidemiológica 22, 8 por ciento en la 23 y 11 por ciento en la 24 (del 13 al 19 de junio), lo que se traduce en que del viernes pasado a este lunes se pasó de 30 mil 868 a 32 mil 520 casos activos, es decir, pacientes que tienen una infección y capacidad de transmitirla.

Desde una perspectiva mensual, entre el 20 de mayo y el 24 de junio se duplicó la cantidad de nuevos casos confirmados, con 2 mil 317 en la primera fecha y 4 mil 479 para la segunda, repunte que ha obligado a varias entidades a volver al semáforo amarillo.

La buena noticia, para nuestro país y la mayoría de las regiones afectadas, estriba en el avance de la vacunación, el cual ha impedido que este salto en los contagios se refleje en aumentos dramáticos en los fallecimientos. En el territorio nacional, la cifra de muertes diarias a causa del nuevo coronavirus se ha mantenido por debajo de 100, en claro contraste con las mil que llegaron a registrarse en el periodo más crítico de la segunda ola.

Hasta el domingo 27 se habían administrado 43.9 millones de dosis de alguno de los biológicos, con lo que una tercera parte de la población adulta ya cuenta con al menos la primera inyección, y los especialistas apuntan a que el descenso en las defunciones respon-de a este avance en la vacunación, pero también a los anticuerpos generados por quienes ya estuvieron expuestos al virus SARS-CoV-2.

Las cifras presentadas muestran la importancia de continuar con la campaña de vacunación, con el fin de reducir tanto como sea posible el número de víctimas mortales, pero al mismo tiempo recuerda que las inoculaciones no pondrán por sí mismas fin a la pandemia ni constituyen una garantía absoluta de inmunidad.

Ante estas evidencias es necesario redoblar las precauciones para no contagiar ni ser contagiados, en el entendido de que la enfermedad llegó para quedarse y de que una victoria sobre el patógeno requiere tanto de los esfuerzos científicos como de la responsabilidad personal.