El Senado aprobó ayer en comisiones el dictamen de la nueva Ley Federal para la Regulación de Cannabis, que hoy se discutirá ante el pleno en un debate en que se confrontarán de nuevo las posturas antagónicas que han estado presentes en esa discusión que lleva más de un año sin resolverse, a pesar de la sentencia de la Suprema Corte que obliga al Congreso a legislar en materia del consumo recreativo de la mariguana.

Durante la reunión de las comisiones dictaminadoras, el presidente de la de Justicia, Julio Menchaca, resaltó que el trabajo realizado en los últimos días permitió incluir inquietudes y propuestas, por lo que habrá una adenda con las modificaciones consensuadas entre las distintas fuerzas políticas.

Jesusa Rodríguez, senadora de Morena, consideró que es lo más que se pudo avanzar, en la meta de lograr la despenalización, porque el hecho de que sólo se regule el consumo de cannabis significa que sigue la criminalización de la planta y de los usuarios.

Reconoció, sin embargo, que es un paso adelante, ya que se eliminó el requisito de registrarse como consumidor de mariguana y la obligación de hacer adaptaciones al domicilio de los fumadores, pero persisten regulaciones que no se imponen para ingerir bebidas alcohólicas o fumar cigarrillos.

El dictamen que hoy se votará mantuvo la posesión hasta de 28 gramos de mariguana para uso personal. A partir de 29 gramos y hasta 200 ameritará multa y después de ello sanción penal.

Poseer más de 200 gramos se considerará narcomenudeo y a partir de 28 kilos será delito de narcotráfico.

Claudia Ruiz Massieu, senadora priísta, sostuvo que el dictamen tiene un importante avance, es mucho más equilibrado entre las distintas posiciones e inquietudes de los consumidores, de la sociedad civil y de los agentes económicos inclusive.

Agregó que tiene una marcada visión social de privilegiar a los grupos vulnerables que puedan eventualmente participar de una nueva rama de la actividad económica de nuestro país. Y, por supuesto, atender la visión y la preocupación en su dimensión de salud pública que tiene este tema.

La morenista Jesusa Rodríguez consideró en cambio que la Suprema Corte mandató al Congreso a legislar sobre derechos humanos y sobre el libre desarrollo de la personalidad, y me parece muy importante dejar en claro que se criminaliza cuando se asume que si no consumes bajo estas medidas restrictivas y con los límites que se ponen, entonces mereces una multa que va desde 5 mil 212 a 10 mil 425 pesos, o prisión por posesión simple.

La senadora panista Indira Rosales reiteró que su bancada votará hoy contra el dictamen, ya que considera negativo legalizar la mariguana.

Por la mañana, integrantes del Movimiento Cannábico Mexicano ofrecieron una conferencia de prensa en la que rechazaron el dictamen y, como protesta, fumaron un cigarrillo de mariguana en el patio de la sede senatorial, a unos pasos del pleno.

José Rivera, miembro de ese movimiento, señaló que desde hace ocho meses mantiene un plantón a las afueras del Senado y resaltó que el proyecto no atiende los criterios establecidos por la Suprema Corte, al impedir el libre cultivo y consumo de cannabis.