Julio César Chávez júnior fue suspendido de forma indefinida por negarse a atender al personal de la Agencia Mundial Antidopaje (WADA, sus siglas en inglés) en octubre de 2019, por lo que la Comisión Atlética de Nevada optó por ampliar la sanción que le había impuesto al púgil de 34 años de edad, quien cada vez se encuentra más cerca del retiro. El 20 de noviembre de 2019, Chávez atendió su primera audiencia vía telefónica y tras la extensión de la sanción tuvo otra el 18 de diciembre, en la que logró interrumpir temporalmente el castigo dos días antes de su pelea programada ante el estadunidense Daniel Jacobs.