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Buscan capitalinos refugio espiritual, por la pandemia

Parroquias de las colonias Villa de Cortés y Nativitas ofrecieron ayer misa presencial

 
Periódico La Jornada
Lunes 20 de abril de 2020, p. 34

La declaratoria de emergencia sanitaria para evitar la propagación del virus causante de la enfermedad respiratoria severa Covid-19 no impide que la parroquia de Santa Rita de Casia, ubicada en la calle Javier Sorondo, en la colonia Villa de Cortés, celebre sus misas dominicales, aunque con muy pocos feligreses, aun cuando los invita a seguirla en redes sociales.

En una hoja pegada en el acceso al inmueble, se lee que ante la contingencia sanitaria que estamos pasando, la parroquia pone a disposición de todos ustedes su Facebook oficial para que desde esta red social puedan seguir las celebraciones litúrgicas.

La celebración de la misa será transmitida en vivo todos los días a las 20 horas en la página de esa red, precisó, aunque las misas no se han suspendido, se llevan a cabo de manera normal todos los domingos, afirmaron algunos asistentes.

Al salir, algunos compran flores, veladoras, cirios, una gelatina o un refresco y galletas si caminan unos metros, mismas que disfrutan por el camellón o las calles de la colonia, aunque cada vez son menos, comentaron vendedores.

Es la única iglesia que tenemos por aquí que todavía ofrece misa, principalmente los domingos, que es el día que salimos de casa para comprar también la comida de la semana y distraernos un poco, expusieron algunos entrevistados.

Las autoridades capitalinas señalaron que todas las actividades no esenciales, como las de las iglesias, argumentaron, debían cerrar sus puertas, sin considerar que para muchos representa el único lugar donde nos sentimos seguros.

Otros explicaron que fueron a misa a pedirle a la Virgen que no nos enfermemos; ya estamos grandes y solos, porque los hijos hicieron su vida, pero eso no quiere decir que queremos morirnos, nos estamos cuidando y encomendando a ella para salir adelante.

Cada domingo, explicaron unos más, venimos a escuchar misa, tratamos de no faltar porque es el único momento en que nos sentimos seguros, porque Dios nos protege, y esperamos que no quieran cerrar la iglesia, por cumplir con un deber con sus feligreses.

Mientras, a un kilómetro de distancia, en la calle Don Luis, en la colonia Nativitas, se ubica la iglesia de Nuestra Señora de las Tres Aves Marías, que tiene también sus puertas abiertas para rezar, lo cual es un alivio para quienes escapamos de casa por unos minutos y pedir por que esta pandemia desaparezca y no cobre más vidas.