Habitantes de barrios y pueblos originarios de la capital del país interpondrán una acción de omisión legislativa ante la Sala Constitucional por no consultar a la ciudadanía para la creación de la Ley de Pueblos y Barrios de la Ciudad de México.

Para impulsar dicha acción, los pobladores buscan reunir 5 mil firmas de personas que habiten en pueblos y barrios y estén registradas en la lista nominal de electores de la capital.

Reiteraron que la nueva legislación violenta los derechos fundamentales de los pueblos originarios al no aplicar la consulta ciudadana, no establecer mecanismos para el desarrollo inmobiliario, dejar en manos de las autoridades decidir cuáles son los pueblos y barrios originarios, e intervenir en los mecanismos de autogobierno y autonomía.

En cuanto a la Ley de Planeación, denunciaron que habitantes de los pueblos tampoco fueron considerados para su elaboración; además, la legislación contiene mecanismos para frenar el avance de la mancha urbana y pone en riesgo el suelo de conservación y el territorio de los pueblos y barrios.

Fecha de entrega

Las leyes fueron aprobadas sin un adecuado proceso de consulta con los pueblos y barrios originarios. La acción será presentada la primera semana de marzo.

Se requiere presentar 5 mil firmas y las vamos a presentar de todas las alcaldías, solicitando que se anule esta ley y se reponga todo el proceso, dijo Alejandro Velázquez, abogado de la Coordinación de Pueblos y Barrios Originarios y Colonias de Xochimilco.

En días pasados, este medio publicó que para la creación de la Ley de Pueblos Indígenas y Barrios Originarios de la Ciudad de México, que fue publicada en diciembre pasado, el Congreso capitalino consultó apenas a mil 161 personas, lo que representa menos de uno por ciento del total de habitantes pertenecientes a ese sector.

En ese sentido, los inconformes manifestaron que prácticamente la consulta no fue difundida con anticipación.

Se debió haber convocado a las autoridades tradicionales del pueblo, y no hay ningún registro de que haya una invitación personalizada, dijo Velázquez.