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Despertar en la IV república

Partidos políticos: eliminar el litigio interno

E

n la ley y en los estatutos de los partidos se contempla la existencia de órganos que resuelvan los conflictos internos, es decir, las pugnas inevitables que existen entre los militantes y miembros de un mismo partido. Hasta hoy, el litigio dentro de esos grupos ha tenido efectos desastrosos creando rupturas y sectarismo, produciendo heridas que no pueden cicatrizar fácilmente, engendrando rencores que pueden durar generaciones. Provocan pérdidas de energía y recursos que deberían emplearse para el fin natural de estos institutos políticos, que es empeñarse en vencer a sus adversarios y llegar lícitamente al poder.

Existe una opción innovadora: utilizar los medios alternativos de solución de controversias como la conciliación, el arbitraje y la mediación. Mecanismos que permiten la participación activa de las partes en conflicto. Dentro de los procesos internos de los partidos políticos o fuera de ellos surgen muchos desacuerdos. Algunos llegan a afectar de forma directa el interés del instituto. Estas desavenencias podrían dirimirse relativamente fácil con la ayuda de un tercero ajeno al conflicto, un mediador electoral encargado de escuchar a las partes y de lograr que éstas se escuchen y lleguen a un acuerdo.

“Con la mediación electoral se podrá avanzar en la gestión y solución de conflictos hacia el interior de los partidos, los cuales llegan a saturar al sistema judicial electoral en temas como la selección de candidatos… se trata de una vía diferente y confiable, fundada en derecho, para darle salida justa a problemas entre personas o entre personas e instituciones… es dable pensar en respuestas más expeditas, accesibles y eficaces… la parafernalia judicial que puede y debe quedar inscrita en la atención de conflictos irresolubles y que requieren forzosamente de la tarea conmutativa de un juzgador” (Dr. P. Hernández Mergoldd).

Debemos optar por una cultura de la paz dentro de los partidos políticos que fomente la fraternidad entre sus miembros. Esto promoverá la participación activa en forma equilibrada y justa de las partes involucradas. La inclusión de la mediación para la gestión y solución de conflictos relacionados con los derechos políticos de los militantes deberá avanzar y cristalizarse como parte de la justicia electoral. (Colaboró Meredith González A.)