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Ver día anteriorMartes 11 de junio de 2019Ver día siguienteEdiciones anteriores
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Negocios y empresas

AHMSA, nadie se salva

N

i usted ni yo nos libramos de los robos cometidos por la administración de Altos Hornos de México (AHMSA), por lo que, de comprobarse los malos manejos, el dinero hurtado tiene que recuperarlo el gobierno en beneficio del país.

El robo cometido por conducto de AHMSA no sólo afectó a Petróleos Mexicanos (Pemex), que con el apoyo de Emilio Lozoya y Enrique Peña hicieron un negocio de más de 700 millones de dólares con Agronitrogenados, tomando en cuenta pasivos históricos, nuevos créditos y pagos a la pandilla de cuello blanco de la empresa y del gobierno.

Desde que Carlos Salinas de Gortari entregó el control de AHMSA a Lozoya y a la familia Autrey, en 1991, se han presentado irregularidades. Primero, tomaron créditos multimillonarios que se derrocharon. Después, en 1999, suspendieron los pagos para aprovechar la antigua ley de quiebras. Luego, Ancira y su equipo retuvieron ilegítimamente el control de la empresa y dejaron en el limbo el pago de pasivos e intereses a lo largo de 17 años, abuso excepcional en la historia de los mercados financieros y bursátiles del mundo. En forma paralela, los principales accionistas evadieron el pago de impuestos, por lo que Autrey y Ancira huyeron del país. A Autrey lo privaron de su libertad en España hace años, y casualmente lo mismo acaba de pasarle a Ancira en el mismo país.

Al regreso del PRI al gobierno con Peña Nieto y en contubernio con Lozoya, Ancira vendió a Pemex chatarra a precios de oro. Hubo transferencias multimillonarias a cuentas personales de políticos y empresarios a través de paraísos fiscales, por lo que trabajadores, acreedores y accionistas minoritarios de AHMSA salieron perjudicados con dichos movimientos.

En síntesis, los malos manejos en AHMSA perjudicaron al fisco; a los accionistas nacionales y extranjeros minoritarios; a los acreedores que les prestaron más de 2 mil 500 millones de dólares; a proveedores que no les pagaron; la imagen de los funcionarios públicos que dejaron pasar las irregularidades cometidas; al pueblo, al que robaron recursos multimillonarios de Pemex, y a México, al posicionarlo como uno de los países más corruptos del mundo.

¿Recuperaremos los millones de dólares que nos robaron?