Las trabajadoras del hogar se han convertido en víctimas de dos nuevas modalidades de fraude denominadas la patrona y sobre amarillo, por medio de las cuales han hecho pagos desde 3 mil pesos hasta 100 mil dólares, entre joyas y artículos de valor.

El Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México explicó que dichas modalidades registran un crecimiento de 50 y 32 por ciento, respectivamente, con base en las denuncias presentadas el año pasado.

Las demarcaciones con mayor número de fraudes de la patrona son Álvaro Obregón, donde se reportaron 10 por ciento de los casos, seguida de Miguel Hidalgo, Cuauhtémoc, Coyoacán, Benito Juárez, Tlalpan, Cuajimalpa y Gustavo A. Madero.

En la demarcación de Gustavo A. Madero, por otra parte, se concentró 14 por ciento de los fraudes de sobre amarillo, seguida de Álvaro Obregón, Benito Juárez, Iztapalapa, Coyoacán, Miguel Hidalgo, Tlalpan y Cuauhtémoc.

Las personas que resultan más afectadas por los grupos delincuenciales que cometen estos delitos, cuyos miembros simulan ser abogados, agentes del Ministerio Público, contadores, personal de Hacienda o hasta familiares, son funcionarios públicos, directores de bancos y empleados de clase media.

El organismo explicó que en la primera modalidad obtienen datos de la patrona, previas llamadas de sondeo a las trabajadoras del hogar; revisan las redes sociales de la familia y los investigan de manera presencial.

Después engañan a la trabajadora del hogar diciéndole que la patrona o el patrón está en problemas legales; las amenazan para que no los alerten y las inducen a cooperar para que ellos salgan de la emergencia que tienen.

Otras modalidades

En la modalidad de sobre amarillo, precisó el Consejo Ciudadano, los grupos delincuenciales llaman a las empleadas para pedirles que busquen en la recámara un sobre con esas características con dinero o en la caja fuerte, donde hay llaves, joyas o relojes.

La desesperación de la mujer les permite controlarla y utilizar su celular para tomar videos o fotografías de los lugares donde busca el supuesto sobre, una vez identificados los objetos de valor, joyas y dinero en efectivo, le piden guardarlos en una bolsa negra o maleta.

Antes de concluir la llamada, el supuesto abogado, funcionario o agente del Ministerio Público espera en la entrada del domicilio y se lo entrega a un cómplice, aunque en otros casos se le pide depositar dinero en efectivo en tiendas de conveniencia, indicó.

Del 18 de enero al 19 de marzo, en la línea de seguridad 5533 5533 se recibieron mil 688 reportes para denunciar el delito de fraude, siendo el más común el de ganador de premio, con 39 por ciento de los casos.

El pariente que viene de visita se ubica en el segundo sitio, con 23 por ciento, seguido de la venta y compra por Internet, con 17; persona lesionada, detenida o accidentada, con 12, y en último sitio los casos de dueño o patrón con problemas legales, con 9 por ciento.

Los grupos delincuenciales se aprovechan en esta última modalidad de la vulnerabilidad, la falta de información y la lealtad de las trabajadoras domésticas que las lleva a realizar cualquier cosa por ayudar a sus patrones, destacó.

Mencionó que estos datos fueron entregados a las autoridades capitalinas para iniciar una campaña semejante a la impulsada en relación con el delito de extorsión en su modalidad de gota a gota, con la finalidad de evitar que se consume o aumenten los casos.