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Esperan que el BdeM no encarezca más costo del dinero

Decisivo, un paquete económico responsable para 2019: analistas

Posible, otro aumento en la tasa de referencia para diciembre

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▲ El Banco de México elevó a 8 por ciento la tasa de interés de referencia. Al encarecer el financiamiento busca inhibir el consumoy frenar la inflación.Foto José Carlo González
 
Periódico La Jornada
Domingo 18 de noviembre de 2018, p. 21

El tono empleado por el Banco de México este jueves para anunciar el tercer incremento en la tasa de interés en este año dejó abierta la puerta para un nuevo aumento en diciembre, dado que el balance de riesgos para la inflación se ha deteriorado y muestra un importante sesgo al alza, comentaron analistas financieros.

El banco central dejo la puerta abierta a un incremento adicional de la tasa de referencia en la reunión del próximo 20 de diciembre, probablemente de otro cuarto de punto porcentual. Para entonces se evaluará el paquete económico para 2019 que presente la nueva administración pública, así como la política de salarios mínimos, comentó el área de análisis de Santander México.

En la penúltima reunión de política monetaria del año, realizada el jueves pasado, el Banco de México decidió elevar de 7.75 a 8 por ciento la tasa de interés de referencia, cuya variación determina el costo al que se financian las empresas y familias. Con esa medida, el banco central busca contener presiones inflacionarias, a partir de encarecer el financiamiento e inhibir, de esa forma, decisiones de inversión o consumo.

El Banco de México sustentó la decisión de elevar la tasa en un deterioro de las condiciones para que baje la inflación. El banco central mencionó que desde la decisión previa de política monetaria, el 4 de octubre, el peso registró una depreciación importante que respondió a factores externos –el alza de tasas en Estados Unidos y la volatilidad financiera internacional–, pero también a internos.

Respecto de los últimos, la junta de gobierno del Banco de México destacó que la cotización del peso fue afectada por el anuncio de la intención de cancelar el proyecto en Texcoco del nuevo aeropuerto internacional de México, así como por la preocupación de los mercados por las políticas de la nueva administración y algunas iniciativas legislativas, lo que llevó a varias agencias calificadoras a cambiar la perspectiva de la deuda soberana del país de estable a negativa.

No habrá cambio: Banorte

La forma en que el Banco de México comunicó la decisión, el jueves pasado, de elevar la tasa de interés de referencia refleja preocupación por los riesgos para la inflación y sus expectativas tanto por factores internos como externos, opinó el área de análisis de Banorte.

A pesar de que reconocemos riesgos de alzas adicionales, mantenemos nuestra expectativa de que la tasa de referencia se mantendrá sin cambios el resto del año y durante el primer semestre de 2019, apuntó.

La previsión de Banorte se basa en que el próximo gobierno presente un paquete económico responsable para 2019 –la fecha para entregarlo al Congreso es el 15 de diciembre.

En opinión de Banorte la nueva administración continuará con el esfuerzo de reducir el monto de la deuda pública como proporción del producto interno bruto (PIB), así como de lograr un superávit primario (ingresos menos gasto antes del pago de intereses de la deuda) de entre 0.5 y 0.8 por ciento del PIB.

En este sentido, la publicación confirmará a los inversionistas el compromiso con finanzas públicas sanas y la estrategia de reducir la deuda pública como porcentaje del PIB. Consideramos que la volatilidad en los mercados podría reducirse tras este evento, añadió.

Para 2019 Banorte espera que la tasa de interés de referencia permanezca en 8 por ciento al menos durante el primer semestre, aunque, mencionó que el balance de riesgos para mayores alzas ha aumentado.

“A pesar de esto, creemos que la junta de gobierno del banco central está poco dispuesta a continuar incrementando la tasa ante la probable moderación del crecimiento económico en 2019, como sugiere el comportamiento histórico del PIB el primer año de una nueva administración, y que la inflación subyacente –que no incluye precios agropecuarios y de combustibles– continuará su tendencia la baja”.