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Ni perdón ni olvido, señalan durante foro por la pacificación, en Monterrey
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▲ El próximo secretario de seguridad pública, Alfonso Durazo, escuchó en Monterrey a familiares de víctimas.Foto Notimex
Corresponsal
Periódico La Jornada
Miércoles 19 de septiembre de 2018, p. 12

Monterrey, NL., Con enérgicos reclamos de familiares de desaparecidos y de las víctimas del incendio en el Casino Royale, ayer dio inicio el sexto Foro por la Pacificación y la Reconciliación, Escucha Monterrey, que promueve el próximo gobierno federal.

Alfonso Durazo, futuro secretario de seguridad pública del país, y Loretta Ortiz, coordinadora del proceso de consulta nacional, fueron testigos de la protesta en la Facultad Libre de Derecho, ubicada en el municipio metropolitano de Santa Catarina.

Los problemas que plantean las víctimas no se generaron ayer y será muy difícil resolverlos de un día para otro. Pero sí puedo dejarles la certeza de que en el próximo gobierno, sin demagogia, yo seré un gato de la sociedad, un gato de la gente y estaré 100 por ciento a su servicio, señaló Durazo.

Uno de los más fuertes reclamos fue el de Samara Pérez, vocera de los familiares de las 52 personas que murieron en el incendio al Casino Royale de Monterrey en 2011, y lo dirigió contra el secretario estatal de Seguridad Pública, Bernardo González: “Esos 17 delincuentes que están en la cárcel, que mínimo tengan sentencia, que no salgan nunca más, que no maten, que no desaparezcan a nadie.

No es posible, de verdad se lo digo, que esté ahí usted tan tranquilo; mire cuánta gente está allá, dígame si tiene usted calidad moral para estar ahí sentado, no es posible. Qué vergüenza que no haya tenido la cara de ver a las familias en todo este tiempo que usted (Bernardo González) estuvo como procurador, como autoridad, expresó Samara Pérez desde el presídium, casi a gritos, dirigiéndose al funcionario que la observaba impasible.

Con mantas y pancartas con las fotografías de desaparecidos y mensajes pidiendo justicia, integrantes de los grupos Eureka, Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos en Nuevo León y Eslabones Nuevo León por los Derechos Humanos, y unas 500 personas llenaron los espacios en el presídium, los barandales y muros de la institución educativa. Una manta señalaba con enormes letras: Ni perdón ni olvido.