Domingo 30 de julio de 2017, p. 20
El mandatario norcoreano, Kim Jong-Un, afirmó ayer que, tras la prueba exitosa de un misil intercontinental, “todo el territorio de Estados Unidos” está a su alcance, incluyendo, según algunos expertos, ciudades como Nueva York.
La amenaza preocupa a Estados Unidos a punto tal que el Pentágono comenzó a hablar de manera explícita de respuesta militar, mientras China llamaba a todas las partes a la moderación.
Con el disparo –el viernes– de un misil balístico intercontinental, Corea del Norte volvió a retar al presidente estadunidense, Donald Trump, quien calificó la acción de “temeraria y peligrosa” y ordenó ejercicios militares conjuntos con Corea del Sur.
Según Kim, la prueba demostró la capacidad de Corea del Norte para lanzar un ataque “en cualquier lugar y momento”.
La agencia oficial norcoreana KCNA agregó: “El líder dijo orgulloso que la prueba confirmó además que todo el territorio de Estados Unidos está ahora a nuestro alcance”.