Desde aguas frescas de frutas, refrescos artesanales, pozol, chocolate y café, hasta pulque, tejuino (cerveza de maíz), tequila, charanda, mezcal, bacanora, raicilla, sotol y otras bebidas alcohólicas producidas de manera artesanal o por pequeñas y medianas empresas de todos los estados del país, estarán presentes en la primera Feria Nacional de Bebidas Típicas, que se llevará a cabo en la Ciudad de México del 13 al 15 de octubre.

El objetivo es que la gente conozca y deguste dichas bebidas, con o sin alcohol, a la par que diversos antojitos o platillos típicos, incluídos los que se elaboran con insectos, los cuales se comercializarán durante la feria, pero también se pretende que la exposición se convierta en un gran escaparate y medio de contacto directo entre quienes las fabrican y grandes centros de consumo con el fin de eliminar el intermediarismo e impulsar el desarrollo económico de los productores, aseveró Luis Gómez, director de GLP Viajes y Eventos Internacionales y organizador.

La feria no sólo es un acto, es un proyecto de negocio que pretende impulsar el desarrollo de los artesanos que generalmente son vistos como la última parte de la cadena productiva, cuando de ahí surgen productos que son codiciados y reconocidos, más en el extranjero que en México, pero quienes se llevan el triunfo son los comercializadores en lugar de los productores, que a duras penas sacan para el pan de cada día, lo cual no nos parece justo, señaló.

La variedad de bebidas tradicionales es bastante amplia. La feria se realizará en Expo Reforma y constará con 87 stands de diferentes estados, agregó.

Algunos productos tienen marcas particulares, como el pulque Perro reciclado o el mezcal Dos coyotes.