engo de un lugar de la música en el que no existe ‘lo incorrecto’. Lo que hago tiene más que ver con la expresión, lo cual es personal para cada individuo”, dijo a quien escribe en 2006 (http://bit.ly/2qJsO1B), el autor, guitarrista y cantante Thurston Moore, líder de la seminal banda de rock y noise Sonic Youth (SY), extinta desde 2011, una vez que éste y su esposa, la bajista de la misma, la gran Kim Gordon, vivieran una dolorosa ruptura. Acorde con tal sentencia, a propósito de la aparición de su quinto álbum solista Rock N Roll Consciousness (2017), dijo al medio The Age: “La escena en la que puedes improvisar te causa menos ansiedad, pues no estás al pendiente de que la industria musical te apoye; eso aquí no importa, es una zona marginal, salvaje, libre, llena de gente devota. Con SY pude generar un espacio en el que logré que coexistieran el rocanrol de industria, con toques de ruidismo”.

Y ciertamente, ahora como solista de lleno, Moore sigue combinando ambos mundos y no deja de manifestarse desde la libertad de su sonido único, inconfundible; más desde la voz propia, que del virtuosismo: Con esta música te expresas a partir de tus respectivas habilidades. Algunos conservadores quizá no tengan tiempo para gente como yo, pero independientemente de tu nivel de ejecución, puedes ser un músico completamente válido: estoy por la liberación de la música, dijo también a la autora de este espacio.

Lo anterior quedó igualmente demostrado en la última de las varias actuaciones que ha hecho Moore en la CDMX (dos veces con SY, 2004 y 2007; 2006 en el festival Radar), el pasado 30 de marzo dentro del ciclo Poesía en Voz Alta, en que recitó varios poemas suyos y al final, con sólo su voz, pero sobre todo con su guitarra eléctrica, generó hermosos paisajes cósmicos que no necesitaban de más instrumentos. Y es justo ése el lugar sonoro donde se encuentra. Claramente, lo aquí emitido fue un reflejo de su nuevo disco, que no es un trabajo de transición, sino uno muy serio, dijo también a The Age.

Se trata de su tercera grabación solista tras el quiebre del grupo, y la diferencia anímica entre éste y los dos previos, es notable. En los bellos Demolished Thoughts (2011), a media ruptura, y The Best Day (2014), Moore suena la mar de taciturno y triste; ahora, parece que el dolor ha sido mitigado, y la energía luminosa está de vuelta: en sólo cinco tracks (dos de 12 y 10 minutos, los otros de seis a ocho), Moore refina su estilo con gran volatilidad y larguísimos pasajes instrumentales, antes de que voces ocasionales aparezcan. Con la misma alineación del disco pasado, Steve Shelley (baterista de SY), Deb Googe (bajista de My Bloody Valentine), el guitarrista James Sedwards y el poeta Radio Radieux en algunas letras, arma un disco breve de hipnosis minimalista, machacante, trepidante, gozoso, rítmico, lleno de matices y emociones oblicuas, con letras de espiritualidad budista, sexo y posteridad.

El estilo de SY, que fue esculpido alejándose de los clichés del rock y los requintos de blues, donde el estallido se va acumulando mediante texturas, distorsiones yuxtapuestas, feedbacks enfebrecidos, y en vez de gritos, voces contenidas, en apariencia inexpresivas, clamando visiones lírico-sardónicas, aquí prevalece, con un aditamento: juega con tener conciencia del rocanrol y hace requintos pocas veces socorridos, a ratos con la potencia macabra de sus colegas Swans, para luego tornarse amable y cool. El sello Sonic Youth es ineludible, pero a diferencia de sus solistas previos, es la primera vez que pareciera no ser un proyecto derivativo o a la sombra de otro, sino uno en el que se planta en firme, ya no como algo personal, sino como una continuación de su trabajo profesional a gran escala. Ojalá traiga pronto este sonido a México, con banda completa.

Enjambre. Tardeada punk.

Viernes 5. El pop retro y enamorado de Enjambre vuelve con Imperfecto Extraño, disco próximo a aparecer, en vivo. Metropólitan (Independencia 90, Centro). 20 horas, $315 a $1000.

Sábado 6. 1. Café Tacvba edita hoy en streaming (Spotify) su octavo disco, Jei Beibi, del cual ya ha adelantado cuatro temas, inclinados al rock directo (como lo hecho en Sino, 2007) y a las letras harto sentidas, enfocadas en la vivencia fuerte, más que en lo estiloso (salvo Futuro, una divertida tecno-cumbia-rebajada). Como parte del lanzamiento, actúan los días 6 y 7 de mayo en El Plaza (Juan Escutia 4, Condesa); 19 horas, $1200 a $1600. El disco completo será presentado el 23 de noviembre en la Arena Ciudad de México (si compran boleto el 9 de mayo, los primeros mil 500 recibirán el disco en físico y acceso a firma de autógrafos con la banda) 2. El ciclo Hertzflimmern (artistas del sello alemán Raster-Noton) cierra con una novena noche de techno oscuro a cargo de la Dj Dasha Rush (Rusia), Kangding Ray (Francia); de México: Zombies in Miami, Demian Licht y Blakks. Casino Metropolitano (Tacuba 15, Centro). 21 horas, $250 en boletia.com

Domingo 7. Tardeada enferma de punk y garage: Las Navajas, Ugly Miss Piggy, Electric Shit, Las Pipas de la Paz, entre otros. Alicia (Cuauhtémoc 91-A, Roma; 17 horas, $60). Más conciertos

Twitter: patipenaloza