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En Lagos, cinco creadores presentaron sus colecciones para tallas grandes

Los diseñadores en Nigeria prefieren modelos con curvas generosas
Foto
Durante la peculiar pasarela escenificada en LagosFoto Afp
 
Periódico La Jornada
Lunes 31 de octubre de 2016, p. a18

Lagos.

Karl Lagerfeld dijo una vez que nadie tiene ganas de ver a mujeres gordas en la pasarela, pero en Nigeria los diseñadores prefieren modelos con curvas generosas.

En la apertura de la Semana de la Moda de Lagos, cinco diseñadores presentaron colecciones para modelos de tallas grandes. Todo mundo tiene derecho a dar su opinión, pero si él estuviera en África, probablemente no habría hecho esas declaraciones, dijo la diseñadora Aisha Abubakar Achonu, durante uno de los desfiles. Esta creadora de 32 años afirmó que en Nigeria cuantos más kilos mejor. Nuestra cultura aprecia las tallas grandes más que en otras partes del mundo, contó. Ninguna mujer debería estar sometida al dictado de tener un físico determinado, agregó. La mayor parte de la sala dijo estar de acuerdo.

Cuando la primera modelo con curvas generosas pisó la pasarela con prestancia, con los labios maquillados de un rojo vivo y luciendo lentes oscuros, el público enloqueció. Contrariamente a sus colegas de silueta de sílfide que desfilaron antes, las modelos XL pisan con brío, envían besos al público y caminan en la pasarela aclamadas por la multitud. A su paso recogían inclusos los piropos de los camareros, que vestidos impecablemente de camisas blancas silbaban o gritaban mamá. ¡Dios mío!, exclamó maravillada entre el público una joven delgada, de pelo afro y unos pendientes dorados.

La modelo Olivia Emenike, que mide más de 1.80 metros y usa talla 48, confesó su admiración por la modelo estadunidense del movimiento curvy Ashley Graham y por Kim Kardashian. En la pasarela se siente fabulosa.

Nunca me he sentido mal por mi constitución o por mis muslos anchos. Nadie debería sentir vergüenza por su físico, destacó la corpulenta joven de 25 años. Quise participar en este festival para demostrar que las mujeres que llevan ropa de tallas grandes también pueden ir a la moda, afirmó.

Muchas marcas internacionales, como Target o Mango, se han apuntado a la tendencia, que durante mucho tiempo era denostada. En Estados Unidos, la actriz Melissa McCarthy anunció que lanzaba su propia línea de ropa cuando ningún diseñador quiso vestirla para la ceremonia del Óscar en 2012.

La venta de ropa de tallas grandes también se transformó en un negocio muy apetecible: en Estados Unidos este mercado movió 20 mil 400 millones de dólares en 2016, según la consultora NPD Group. En África también ha crecido la demanda de ropa para las mujeres macizas y esto ha incitado a los creadores a lanzarse a este mercado. “Cuando una mujer rellenita como yo mira la ropa dice ‘yo puedo identificarme con esto”, opinó la diseñadora Makioba Olugbile, quien ideó una espectacular colección en blanco y negro, inspirada en la Luna. Para brillar, afirmó la creadora. Ahora las tallas grandes son aceptadas, precisó.

Entre bastidores, el entusiasmo se propagó. “Vi algunas modelos desfilando y tenía ganas de decir: ‘Vamos chicas’”, contó Aduke Shitta-Bey, una joven modelo de 18 años con un vestido de encaje blanco y de pelo recogido en una cola de caballo.

Estar rellena es lo sano

Los nigerianos aprecian las curvas, indicó la joven, a quien los hombres a veces le preguntan ¿Por qué estás tan delgada? Ellos consideran que estar rellenita es lo sano. Es la belleza nigeriana, afirmó.

El desfile XL fue organizado por Latasha Ngwube, una periodista de 33 años que creó una página web sobre esta tendencia (About That Curvy Life), destinada a inspirar y apoyar a la comunidad de las tallas grandes.

Ngwube comenzó usando la etiqueta #AboutThatCurvyLife y su sitio tiene más de 15 mil visitas cada semana.

Es el principio de un movimiento, celebró Ngwube, que defiende que esto no es sólo una moda, sino también un movimiento para aprender a ser positivo sobre el propio cuerpo. Es la libertad de poder desear ser bella.