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El monto contra el hambre creció y también el problema

Más recursos en programas sociales no abaten carencias, señala estudio
 
Periódico La Jornada
Sábado 17 de septiembre de 2016, p. 9

Aunque se ha elevado el presupuesto de programas orientados a reducir las carencias sociales, que sirven de base para la medición de la pobreza, no todas ellas se han abatido y en algunos casos se han elevado, como es el caso del acceso a la alimentación.

El análisis Carencias sociales, una visión desde el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación, divulgado en el boletín quincenal de la subsecretaría de Planeación de la Secretaría de Desarrollo Social, refiere que en los casos en que hubo reducción es posible atribuir en gran medida la caída de las carencias al aumento del presupuesto destinado a los programas que las atienden.

Refiere que uno de los elementos más importantes con los que cuenta el gobierno federal para cumplir con sus funciones y con los objetivos de desarrollo social, es el gasto público. Por lo que es común asociar la magnitud del gasto destinado a los programas públicos con la efectividad de éstos. Así, se plantea como deseable dirigir y orientar los recursos públicos hacia los problemas que más aquejan a la sociedad.

Aunque, precisa que la evolución de las carencias no puede atribuirse únicamente a los aumentos presupuestales, ya que el crecimiento y el desarrollo económico del país son piezas fundamentales, indica que conocer la evolución de las carencias sociales permite priorizar entre los programas con mayor incidencia en la pobreza, así como entre los que han reportado un mejor desempeño, de forma que los proyectos de presupuesto focalicen los recursos hacia los sectores donde más se requiere.

Detalla que en el caso de seguridad social, entre 2010 y 2014 el presupuesto de los programas que la atienden tuvo un incremento real de 234.5 por ciento, pero la caída entre la población fue sólo de 1.6 por ciento entre 2008 y 2014.

Explica que los programas enfocados en atender la carencia por acceso a la alimentación tuvieron un aumento presupuestal de 100.5 por ciento, en términos reales, pero la carencia por acceso a la alimentación se incrementó 17.4 por ciento entre 2008 y 2014.