Miami.

Un agente de deportistas con sede en Florida, que ha trabajado con una compañía que está asociada con el cantante Marc Anthony, fue acusado de cargos relacionados con el tráfico de jugadores de beisbol de Cuba a Estados Unidos.

El vocero de investigaciones del Departamento de Seguridad Nacional, Néstor Iglesias, confirmó en Miami que Bart Hernández fue arrestado en un operativo con la FBI. El viernes se reveló un pliego en el que se acusa a Hernández de dos cargos de complot, que se relacionan con el jardinero Leonys Martín, actualmente con los Marineros de Seattle y antes en los Rangers de Texas.

Además de los cargos penales, los fiscales federales buscan que Hernández renuncie a 1.5 millones de dólares y a cualquier interés que ese adeudo genere en los contratos de Martín y de otros peloteros. Debería también deslindarse de un procedimiento de arbitraje que involucra a Martín, de acuerdo con el pliego acusatorio.

Asimismo, los fiscales quieren incautar una motocicleta Honda de 2001.

Preocupación del cantante

Hernández ha trabajado con Praver Shapiro Management, que en noviembre anunció una sociedad con la compañía Magnus Media, de Marc Anthony. Una llamada a Praver Shapiro no encontró respuesta el viernes.

Magnus Sport y el señor Marc Anthony están sorprendidos y preocupados por enterarse de los cargos presentados contra el contratista independiente Bart Hernández, señaló la empresa del cantante en un comunicado. Condenamos en términos firmes e inequívocos cualquier forma de conducta como la que se menciona en la acusación. Confiamos en que el proceso legal derivará en un veredicto justo.

Las Grandes Ligas y el sindicato de peloteros se negaron a emitir comentarios sobre Hernández, quien estaba certificado por el gremio para fungir de agente.

Un magistrado determinó una audiencia para el lunes, cuando se definirá la fianza de Hernández. Los fiscales solicitaron que permanezca detenido hasta el juicio.

Los abogados Jeff Marcus y Daniel Rashbaum emitieron un comunicado en el que consideraron que la acusación constituye un intento de criminalizar una disputa entre Martín y Hernández por concepto de tarifas.

En el caso más reciente de deserción del equipo cubano de beisbol, Yulieski Gourriel (en la imagen) y su hermano Lourdes se fueron al terminar la Serie del Caribe realizada en República DominicanaFoto Ap

Como demostraremos en el juicio, Bart Hernández es un talentoso y ético agente deportivo, que siempre ha hecho lo correcto por sus clientes, agrega el boletín.

De acuerdo con los abogados, Hernández debía presentarse en una audiencia de arbitraje para definir el tema de las cuotas que se le adeudan, la semana próxima. Bart es inocente y los cargos carecen de fundamento, afirmaron.

Martín fue el pelotero clave en una acusación anterior, presentada en el sur de Florida contra cuatro personas, por un complot para traficar ilegalmente jugadores y cientos de personas más, traídas de Cuba con fines de lucro. Tres de los cuatro acusados se han declarado culpables y uno, Eliezer Lazo, cumple condena de más de 14 años de prisión.

El pliego de acusaciones identifica a Hernández como parte de aquel complot, al menos por el proyecto de 2011 que trajo a Martín de Cuba.

La mayoría de los isleños pagó unos 10 mil dólares cada uno a cambio de su traslado a México y después a Estados Unidos. Sin embargo, se supone que Martín pagaría a los traficantes unos 1.35 millones de dólares del primer contrato que firmó con los Rangers, que originalmente le ofrecieron 15.5 millones garantizados por cinco años.

Antes, el caso mostró que algunos cárteles de narcotraficantes en México recibieron una tajada del negocio de contrabando de migrantes. De acuerdo con documentos de la corte, Los Zetas en Cancún cobran a los traficantes cubanos 10 mil dólares por embarcación y hasta 3 mil dólares por indocumentado para que pasen por el territorio que controlan y para prestar ayuda en el pago de sobornos a las autoridades mexicanas.

Por la política conocida como pies secos, pies mojados, los cubanos que llegan a suelo estadunidense reciben en general permiso para quedarse. Los interceptados en el mar son devueltos a la isla.

Otros astros cubanos, como Yasiel Puig, de los Dodgers de Los Ángeles, han sido traídos a Estados Unidos por traficantes desde México.