Las secretarías de Economía (SE) y de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) evalúan cuál será la producción y demanda prevista para este año de algunos productos básicos (granos, hortalizas y frutas) y así determinar cuáles pudieran enfrentar presiones al alza en sus precios, a fin de tener el gatillo y la pistola cargada en caso de que sea necesario autorizar cupos de importación.

El propósito es evitar el riesgo de que por no tomar decisiones oportunas se generen incrementos de precios para los consumidores, pero tampoco se tomarán decisiones de importación si hay suficiente producción en el mercado para no afectar a los productores, anunció Ildefonso Guajardo, titular de la SE, durante su primera conferencia de prensa del año. El funcionario no quiso precisar a qué alimentos se refería para no causar controversia entre los productores.

El secretario desestimó el efecto que la devaluación del peso ha ocasionado en la inflación al calificarlo de limitado y afirmó que ha sido absorbido por los empresarios, que no han trasladado los aumentos de sus productos y servicios a los consumidores por riesgo de equivocarse y perder participación de mercado.

Explicó que a diferencia de la mayoría de las economías emergentes, el peso ha resistido de mejor forma, pues se devaluó 15 por ciento el año pasado, cuando otras naciones, como Brasil y Rusia, han depreciado su moneda entre 50 y 100 por ciento.