Opinión
Ver día anteriorDomingo 6 de diciembre de 2015Ver día siguienteEdiciones anteriores
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A la mitad del foro

Del tren olivo al olvido

El Despertar

Lo peor: faltan tres años

León García Soler
José Agustín Ortiz Pinchetti
Bajo la lupa

Brzezinski recula: pondera acomodamiento con Rusia

Telescopio

Afectaciones

Alfredo Jalife-Rahme
El Buscón
Desde otras ciudades

En NY, la flota más grande de autos eléctricos

Mar de Historias

En el jardín

Cristina Pacheco
¿La Fiesta en Paz?

Pachis y Silverio, más recuerdos de una pareja insólita

“Economía colaborativa”: auge e inconformidades
S

egún cálculos del Instituto Tecno­lógico de Massachusetts (MIT), las empresas pertenecientes a la llamada economía colaborativa generaron el año pasado 26 mil millones de dólares en el mundo y arrojaron beneficios por 3 mil 500 millones. El dato complementa lo que se informó en la edición de ayer de La Jornada, que la compañía de servicios de transporte individual Uber tiene un valor de mercado estimado en más de 60 mil millones de dólares, el cual es superior incluso al de General Motors, el mayor fabricante automotriz de Estados Unidos y uno de los más grandes del mundo. Por otra parte, Airbnb, empresa de hospedaje fundada en 2008, ofrece 2 millones de alojamientos en 190 países y alcanza un valor de mercado de entre 10 mil y 13 mil millones de dólares, igualmente por encima de las compañías más grandes de su sector.

Leonardo Páez
El Correo Ilustrado

Demandan a la Conasami fijar mínimo de $91

L

a Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami) se declaró en sesión permanente a partir del primero de diciembre y dispone de un plazo que vence el 30 de diciembre para fijar los nuevos salarios mínimos generales que entrarán en vigor el día primero de enero de 2016.

Oaxaca: entre las categorías y lo común
C

omo catedrático en el sistema de educación pública de Estados Unidos, he visto cómo los sistemas neoliberales erosionan la percepción de los alumnos sobre un propósito común. Adentro del aula se someten a exámenes estandarizados, y afuera buscan satisfacer a los recaudadores de deudas. Su destino depende de la aprobación de autoridades distantes, no de la validación de sus comunidades y sus pares. Con cada vez mayor frecuencia, los estudiantes de la clase trabajadora toman clases como la ley de la calle, que les enseña cómo vigilarse y encarcelarse entre sí. Un modelo que crea culturas que categorizan, no vinculan. Que castigan, no alimentan.

Eric Larson*
Cómo se cocina información amañada contra el gobierno de Venezuela
C

uando Felipe González dice que en Venezuela hay una tiranía, al que fue presidente del gobierno de España no le exigen los argumentos y las pruebas para sostener esa barbaridad. Sólo añade que en el Chile de Pinochet se respetaban más los derechos humanos que en la Venezuela de Maduro. Al que intenta contestar sí le exigen una documentada y extensa explicación que tropieza con los oídos tapados por la cera de las intenciones blindadas. Venezuela no es una democracia hasta que se demuestre lo contrario, es una tiranía aunque la acusación sólo se sostenga porque todo el mundo lo sabe.

Dilma Rousseff enfrenta su peor momento
A

l aceptar una petición de juicio político cuyo objetivo es la destitución de Dilma Rousseff por el Congreso, el presidente de la Cámara, Eduardo Cunha, del PMDB, profundizó aún más una crisis que ya era tremendamente seria. Se trata, sin medias palabras, de un intento de golpe parlamentario contra una mandataria elegida por expresa voluntad popular.

José Manuel Martín Medem *
Eric Nepomuceno
México imparable
S

e ha dicho que México y su economía pueden ser imparables. Supongamos que así sea, pero entonces convengamos en que ahora no lo son y que tal y como está organizado el Estado y funciona la economía tal hazaña no será posible.

Pleno apoyo a Venezuela independiente y bolivariana
P

ese a todo, en las elecciones parlamentarias venezolanas de este domingo estaré junto a los trabajadores de Venezuela en la defensa angustiada pero decidida de lo que queda del proceso chavista y en su lucha contra todos los enemigos mortales que, desde el exterior y en el país mismo, acechan la revolución bolivariana y la independencia misma del país.

Rolando Cordera Campos
Guillermo Almeyra
¿Discutimos mariguana o la política económica?
¿N

o les parece raro que el Presidente diga que quiere que se discuta el mayor uso de la mariguana, pero que no está de acuerdo con que esa medida se lleve a cabo? No deberíamos extrañarnos si tomamos en cuenta que vivimos en el país de las mentiras. Es obvio que se plantea una discusión estéril, que no se traducirá en los hechos que los partidarios de la mariguana pudieran esperar, porque el Presidente está en contra de su ejecución.

Una primera sobre los derivados financieros
I

ngresar al mundo de los derivados de hoy, de los derivados financieros, es –para decir lo menos– ingresar al mundo de la fantasía. De la dramática y violenta fantasía. Lewis Carroll se sorprendería. Lo imposible se hace posible. Lo irreal se hace real. Lo inimaginable es imaginado. Y lo que se pensó que nunca acontecería, acontece. No es que los derivados sean una novedad. Al revisar –por ejemplo– las máximas de Quesnay de mediados del siglo XVIII, este brillante doctor advierte sobre los riesgos de los documentos negociables que dan cuenta del crédito financiero, “pues las fortunas pecuniarias son riquezas clandestinas que no conocen ni rey ni patria (18ª)… Que el Estado evite deudas por préstamos que formen rentas financieras, pues cargan de deudas voraces al Estado, y ocasionan un comercio o tráfico de finanzas por medio de documentos negociables, cuyo descuento aumenta cada vez más las fortunas pecuniarias estériles, separa las finanzas de la agricultura y priva a ésta de las riquezas necesarias para mejorar los bienes raíces y el cultivo de la tierra(19ª)”. Más claro ni el agua.

Antonio Gershenson
José Antonio Rojas Nieto
El último disparo
C

uando se vio totalmente aislado políticamente, con los principales partidos –incluidos los de oposición– pidiendo su renuncia a la presidencia de la Cámara de Diputados, y cuando se esbozaba claramente su condena en la Comisión de Ética de la cámara –con los votos en contra también del PT–, Eduardo Cunha echó mano de su última arma: aceptó una de las demandas de impeachment contra la presidenta Dilma Rousseff. Esto parece más bien la escena final de una película de far west de tercera categoría, cuando el bandido, en situación desesperada, intenta lanzar su granada para destruir todo lo que pueda.

Especialidades
N

o deja de llamarme la atención la persistencia de añejas vocaciones en los viejos barrios de la ciudad. Uno de ellos es el de San Juan, de los más antiguos. Sus orígenes se remontan a la época prehispánica. En varias ocasiones lo hemos mencionado porque guarda múltiples atractivos. El primero, su historia como uno de los cuatro calpullis que conformaban la prodigiosa México-Tenochtitlan. Tenía el nombre de Moyotlán y tras la conquista se le antepuso el de San Juan, con el que se le conoce hasta la fecha. En ese sitio hubo siempre un tianguis importante, que en el siglo XIX se convirtió en uno de los primeros mercados modernos de la ciudad.

Emir Sader
Ángeles González Gamio
Historia de amor con final
M

e disponía a bajar a desayunar cuando Pánfila me detuvo en la escalera. ¿Podemos hablar de mujer a mujer?, me preguntó, envuelta en un largo enredo de manta, a rayas azul marinas y grises, y un huipil corto bordado en tonos rojos y azules, oscuros también; Pánfila y su pelo largo, negro, lacio, suelto contra la espalda; bajita, Pánfila, delgada, morena, animada, de mirada inquieta. ¿A poco estás enamorada?, bromeé, segura de que tomaría con buen humor mi sutilísimo sarcasmo. Me sorprendió al contestarme sonriente que sí. Contuve la risa a tiempo; ella, con un gesto que entendí de rubor, que expresó al cubrirse con la palma de la mano la mitad de la boca y el ojo de ese lado de la cara. ¡Ay! Pánfila, comenté. ¿Quién es tu enamorado? Es el que lava los coches; tiene el pelo blanco y rizado; va de camisa limpia y planchada, me contó. ¡Ah! ¿y cómo se llama? ¡Quién sabe!, exclamó y agitó la mano como si espantara una mosca; yo no sé. Desde hace años ha trabajado por aquí, desde que yo llegué. Siempre lo he visto, pero no lo conozco; no hemos hablado. No me ha invitado a tomar un café. Sólo me dice que nos casemos, que me vaya con él a su casa. ¿Y dónde vive?, pregunté medio alarmada. ¡Quién sabe! Bien lejos, me contestó Pánfila. Has de estar muy enamorada para irte con él sin saber cómo se llama ni en dónde vive, ¡Ay! Pánfila. Sí; es que siento igual que cuando de joven me enamoré, me confió, y se llevó el puño al corazón, como si lo estrujara. Pasé frente a él y me dijo, Vente conmigo; dejas de trabajar; nos cuidamos; nos enterramos, redondeó Pánfila esta realista declaración que le hizo el lavacoches y que oí bien, nos cuidamos, nos enterramos.

El cuento de los cuentos
U

na invitación a descubrir a Giambattista Basile, fascinante escritor renacentista italiano, autor de El cuento de los cuentos (1632), conocido después como El pentamerón (1674), e inspirador a la postre, con su gusto por la escatología, lo grotesco y lo fantástico, de los cuentos de hadas de los hermanos Grimm y de los de Charles Perrault, naturalmente en su versión anterior a Walt Disney. El libro, disponible parcialmente en la red, está formado por 50 historias, narradas a lo largo de cinco noches, a la manera de los salaces cuentos populares de Giovanni Boccaccio (El decamerón) o de Geoffrey Chaucer (Los cuentos de Canterbury). Del mismo modo en que Pier Paolo Pasolini reconstituyera el espíritu de esas narraciones en su Trilogía de la vida, añadiendo, con fortuna, su adaptación de Las mil y una noches, el realizador italiano Matteo Garrone (El embalsamador, 2001; Gomorra, 2008) se libra ahora a una azarosa adaptación (muy libre, advierte con precaución) del irreverente recuento napolitano.

Bárbara Jacobs
Carlos Bonfil