Familiares de internos del Centro Federal de Reinserción Social 14 de Gómez Palacio, Durango, anunciaron que los reos iniciaron una huelga de hambre para acusar que custodios violan sus derechos humanos, ya que varios de ellos han bajado más de 30 kilos de peso por la mala alimentación que reciben.

Acusaron que Ismael Omar Navar Granados, de 22 años, murió el pasado miércoles y no han entregado el cuerpo a sus familiares que viven en el Distrito Federal porque tienen que pagar 25 mil pesos por el traslado.

Señalaron que en este año enviaron cinco oficios a la Comisión Nacional de Derechos Humanos para explicar las condiciones de los internos, sin que se haya dado respuesta alguna.

Familiares de los reos, quienes pidieron el anonimato, señalaron que el desayuno consiste sólo en una taza de té y un pan; la comida es equivalente al tamaño del puño de una mano, y de cena les dan algo similar al desayuno. Demandaron medicinas y atención médica.

En el Centro de Rehabilitación Social de Colima, donde conviven más de 2 mil internos, se registró un brote de hepatitis aguda, informaron autoridades de la Secretaría de Salud estatal, por lo que realizan acciones de contención sanitaria y vigilancia epidemiológica para determinar el origen del padecimiento.

Informó que en los últimos meses se han registrado nueve personas con ictericia (coloración amarilla en la piel y mucosa), dos más que han recibido atención médica hospitalaria que fueron dados de alta y tres defunciones; estas últimas registradas a finales de octubre y mediados de noviembre.