Deportes
Ver día anteriorDomingo 14 de junio de 2015Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Es algo único, histórico y sorprendente, señaló el Rocket

Impresiona a Loaiza y a Valdez el Zócalo como campo de beisbol
Foto
Los ex ligamayoristas Valdez y Loaiza saludan a los asistentes a la Plaza de la ConstituciónFoto Francisco Olvera
 
Periódico La Jornada
Domingo 14 de junio de 2015, p. a15

Ismael Valdez y Esteban Loaiza quedaron impresionados de que el Zócalo estaba vestido de verde y rojo con el pasto sintético que semejaba un miniestadio de beisbol, pues aun cuando ellos brillaron en los mejores campos en las Grandes Ligas, jamás imaginaron que un lugar tan emblemático de la Ciudad de México convocara a ex jugadores y otros en activo para realizar este domingo un Home Run Derby.

Ambos ex ligamayoristas causaron revuelo entre los cientos de asistentes, la mayoría padres de familia que llevaron a sus hijos que juegan en las ligas infantiles Olmeca, Maya, Tolteca, Lindavista, Tranviaria, Petrolera y Anáhuac, para participar durante los tres días en los festejos del aniversario 90 de la Liga Mexicana de Beisbol.

La plancha de la Plaza de la Constitución, convertida en un diamante, cautivó a personas de todas las edades.

El Rocket, quien llevaba puesta una gruesa cadena de oro, estaba asombrado de ver algo único, histórico y sorprendente, que le da un punto extra al beisbol, que es un deporte familiar, al ser una disciplina que crea buenos hábitos y carácter, por lo que conminó a niños y jóvenes mexicanos a seguir practicándolo para que su país continúe brillando en las Grandes Ligas, como lo hizo en su época de lanzador con varios equipos de Estados Unidos.

De 41 años de edad, conservando la figura y sonriente, el tamaulipeco que debutó con Dodgers de los Ángeles en 1994 y se retiró con Marlines de Florida en 2005, volvió a México y dijo adiós a la profesión hace tres años con Tigres de Quintana Roo. Aunque no está considerado para lanzar hoy, le gustaría hacerlo porque sería una grandeza.

Loaiza, quien saludaba a los asistentes con la V entre los dedos, apenas daba sus impresiones sobre lo bello que está el Zócalo convertido en un campo de beisbol, deporte al que, dijo, hay que apoyarlo mucho.

Sin embargo, su sonrisa se transformó en mueca ante las preguntas de los reporteros de espectáculos, quienes querían saber cuándo saldrá publicado su libro en el que dará a conocer su verdad cuando vivió con la fallecida cantante Jenny Rivera.

Respeto la familia, tengo 23 años como jugador de beisbol y es lo que me importa, respondió, y afirmó que ahora es feliz tras ser padre de Esteban Andrés.

Casi inadvertido, Jafed Amador, jonronero de los Diablos Rojos de México, veía maravillado el diamante: Qué bonito, ojalá pueda volar la pelota.

Portando un diploma autografiado por Loaiza y Valdez, los ojitos de Carlos Ibáñez, de 12 años, se agrandaron. Al pequeño de la Venustiano Carranza y de la Liga Anáhuac poco le importó haber esperado ocho horas. Se retiró contento luego de batear un elevado y estar en la lomita.

Sin embargo, el quinceañero Cristopher Mejía pegó un jonrón en un partido que debió suspenderse casi una hora por las abejas que invadieron el terreno de juego y fue necesaria la intervención de los bomberos para acabar con el panal que se hallaba en la carpa de uno de los patrocinadores.