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Tras ocho años, el cuarteto tapatío consolida su ecléctico proyecto

Estamos lejos de lo experimental y la exquisitez prefabricada: Shanrei
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La banda cuenta con tres producciones y prepara una más que presentará en el DFFoto Chelico
 
Periódico La Jornada
Domingo 1º de marzo de 2015, p. 8

El nombre de un pueblo de Jalisco escuchado por casualidad y el juego fonético de esas palabras creo el nombre de Shanrei. Han transcurrido ocho años del encuentro con el nombre y de la primera alineación de la banda; en los primeros cinco años hubo las deserciones necesarias, pero los últimos tres han sido fructíferos, de consolidación, de la integración total de los músicos al propósito artístico de este cuarteto: Jacs está en la batería; Jed, en la guitarra; Han, en la voz, y Sidd lleva el ritmo en su guitarra bajo.

Ritmos contemporáneos, líneas melódicas ondulantes, efectos ciber e instrumentación construida con base en sonidos emanados de la tecnología y la ciencia son los elementos que envuelven géneros tan diversos como el dark, pop, alternativo, industrial y ruidos atmosféricos que permean las tres producciones discográficas de Shanrei: Sol de hielo, Sol de hielo b sides y la más reciente, The way back home.

Sin hilo negro

En entrevista, el cuarteto coincidió en saberse una banda lejana a intentar inventar el hilo negro, al aseverar es lo que sale y nos gusta el resultado, no buscan la exquisitez prefabricada y aseguraron encontrarse apartados de los terrenos de la música experimental. Están en busca de la sencillez elaborada y profesional que les ha otorgado su trayectoria tanto en la ciudad donde rola la banda, Guadalajara, como ahora en el circuito rocanrolero de la ciudad de México.

Avalados por un amplio repertorio que pueden combinar según las necesidades del concierto, Shanrei puede adaptarse a cualquier clase de presentación, pues cuenta con aproximadamente dos centenares de canciones ya montadas, algunas de ellas con elementos mántricos y con opción a improvisar; aunque obvio, tienen preferencia las rolas incluidas en sus álbumes y las que la gente pide.

Las 34 canciones grabadas por Shanrei no sólo son un muestrario de ritmos y sonidos, sino también de visiones escritas –la mayoría en inglés– sobre temas diversos; hay letras intimistas, confesionales, descriptivas, oscuras, es decir, palabras ocasionadas por estar aquí, por vivir en el caos y ser personas del siglo XXI. Canciones, con nombres tan disímbolos, reafirman el eclecticismo de la banda tapatía: de su primer disco están: Cero gravedad, Run, Wake down y Not alone; del segundo cedé, Now, Cuando el destino se disloca, Mi amplificador y My kick ass girl; en el disco más reciente –The way back home– destacan No more, Careless, The Warrior y Cross. Títulos y contenido similares tiene previstos presentar los integrantes de Shanrei en el disco que están realizando y que en un futuro cercano presentarán aquí en la ciudad de México.