Doha.

El grupo de trabajo de la FIFA que elabora el calendario internacional de partidos para el periodo 2018-2024 sugirió que el Mundial de Qatar 2022 se dispute del 26 de noviembre al 23 de diciembre de ese año, por considerar que es el periodo más viable.

Esta propuesta representa una victoria para el Comité Olímpico Internacional (COI), pero a la vez un dolor de cabeza para el futbol europeo, que deberá reorganizar por completo su calendario.

La decisión, que deberá ser ratificada por el comité ejecutivo de la FIFA los próximos 19 y 20 de marzo en Zurich, implicaría un gran alivio para el COI, que no verá cumplido su temor de que el Mundial se empalme con los Juegos Olímpicos de invierno, a disputarse en Almaty (Kazajstán) y Pekín (China).

Sin embargo, para las ligas y los clubes europeos significaría una profunda alteración de sus calendarios, aunque al mismo tiempo abre la puerta a jugosas compensaciones económicas.

Para la UEFA, que mantiene un fuerte enfrentamiento con la FIFA de Joseph Blatter, la decisión no resultó del todo cómoda, ya que afectará el desarrollo de su certamen estrella y principal fuente de ingresos: la Liga de Campeones de Europa. Durante esas fechas se suele definir la fase de grupos del torneo.

La entidad presidida por Michel Platini habría dado su visto bueno, como aseguró la FIFA y denunció la liga inglesa.

El secretario general de la FIFA, Jèrôme Valcke, dijo estar consciente de que la propuesta no complacería a todos. Está claro que hay pros y contras, pero ha salido una solución y es la de noviembre-diciembre de 2022, declaró.

En tanto, el jefe de la Liga Premier, Richard Scudamore, señaló: Es decepcionante. Es una decisión incorrecta. Hemos sido abandonados por la UEFA.

Frederic Thiriez, presidente de la Asociación de Ligas Europeas de Futbol Profesional, estimó que se trataba de la peor solución para los campeonatos europeos. Yo todavía espero la reunión del 19 de marzo. Después, si tenemos que tomar medidas, las tomaremos, añadió.

Hay que imaginar lo que pasará en Francia, Alemania, España, Italia... se van a detener esos torneos en noviembre, tras 13 o 14 jornadas. Se reanudarán dos meses más tarde, en enero. Durante ese tiempo, los no convocados no jugarán, los clubes no tendrán ingresos, los aficionados se verán privados de sus ligas nacionales y las televisiones pedirán indemnizaciones.