Deportes
Ver día anteriorDomingo 27 de julio de 2014Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Quiere romper paradigmas y el bloqueo mental que prevalece en la natación mexicana

Sueño con una final olímpica y sé de lo que soy capaz, asegura Fernanda González

Llevo mi cuerpo al límite y no sé cómo le hago

Le gusta el glamour y ser el foco de atención

 
Periódico La Jornada
Domingo 27 de julio de 2014, p. a14

María Fernanda González sabe de lo que es capaz y no se cohibe ante nada.

Su gran sueño es ser finalista en los próximos Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016 para superar ese bloqueo mental que prevalece en la natación mexicana, porque en su vida personal tiene otros retos: la mercadotecnia y el modelaje.

Sabedora de que en el mercado actual lo que no se ve no vende en las redes sociales, la mejor nadadora de México no se arrepiente de lo que ha hecho.

No es que sea atrevida, sino que trata de ser diferente, de romper paradigmas en un deporte en el que sólo percibía indiferencia y daba igual si ganaba o perdía, como tampoco tener el apoyo para costear sus estudios y entrenar, razones por las que se fue a Estados Unidos.

Bajo el mando de Gregg Troy, uno de los mejores entrenadores del mundo y forjador de medallistas olímpicos como Ryan Lochte, con el equipo de natación en Florida, la capitalina de 24 años de edad se tomó dos semanas de descanso tras participar en el Campeonato Nacional de primera fuerza en Boca del Río, Veracruz.

En la justa fue seleccionada en 10 pruebas (individuales y relevos) para la cita centroamericana que se efectuará en noviembre próximo en el puerto jarocho.

Aunque su especialidad es el dorso, González, quien representa al estado de México –con el apoyo de su padrino adoptivo Nelson Vargas Basáñez–, se siente orgullosa de sus raíces y le gusta mucho la cocina, que es otra de sus virtudes, confiesa en la entrevista que dio a La Jornada en la alberca del Centro Deportivo Olímpico Mexicano.

Se ve diferente con lo que trae puesto: blusa negra transparente, pantalones de mezclilla entallado y botas, en contraste con la chica que siempre aparece en traje de baño completo y de competencia.

“Me gusta el glamour, lo fashion. Me dirán que estoy loca, pero me encantaría salir a la alberca con tacones, maquillada, con un traje súper y lanzarme al agua. Claro, el reglamento no lo permite y estoy consciente de que me torcería un tobillo; de todos modos ¡me vería bien bonita!

Me gusta que la gente me admire, ser el foco de atención, estar frente a las cámaras, ver mis fotos, no me cohibe nada. Soy una niña normal, muy amorosa, me encanta broncearme en en una alberca o playa, cuando estoy en casa si no salgo ¡duermo 10 horas!, platica.

Recuerda que previo a la justa veraniega de Londres 2012, los aros olímpicos que se tatuó entre la cadera y entrepierna causaron reacciones en favor y en contra en las redes sociales.

Foto
María Fernanda muestra su tatuaje de los aros olímpicos que se hizo previo a los juegos de Londres 2012Foto Yazmín Ortega Cortés

Entre risas pero con voz firme señala: “Me vale dos cacahuates que me critiquen. Hago lo que quiero con mi cuerpo y poseo mis aros. Nada más porque no me los alcanzo los llenaría de besos.

“Tengo dos tatuajes más, una estrella en el tobillo y la palabra ‘serendipity’ en uno de los dedos de mi mano, porque creo que la vida está llena de coincidencias, de accidentes y de cosas que no sabes por qué te llegan.

–¿A dónde quieres llegar?, ¿cuáles son tus anhelos?

–Me siento una líder (en la natación), porque estoy haciendo cosas que antes eran impensables. En México entrenaba 8 o 9 kilómetros en doble sesión y en Florida hago 15 o 16. ¡Termino adolorida! Llevo mi cuerpo al límite y a veces no sé ni como le hago.

“En mi mente (cuando estoy en el agua) solo pienso en ser finalista en Brasil. He aprendido mucho de mí, he crecido en todos los aspectos. Me veo capaz, soy alta, fuerte, rápida y me siento segura de lograrlo.

Con Troy he mejorado en todos los estilos, he bajado mis marcas (en dos años) y debo cumplir todo lo que él me dice para que se den los resultados.

Le agrada que en la selección de natación que participará en los Centroamericanos se combine la experiencia y juventud, y le gustaría compartir sus experiencias, porque cuando ella compitió en sus primeros juegos en Cartagena de Indias 2006 nadie la orientó y llegó como la mayoría de los deportistas, con pánico escénico.

De su debut a los 16 años, evoca: “Estaba en el banco (de salida), me temblaba todo, quería cerrar los ojos, me sentía bloqueada. Ni sé que pasó y cuando estuve en el agua me dejé llevar y gané la medalla de oro en 100 dorso.

Cuando estás chiquita ni te das cuenta de lo que logras, nadie te lo dice y creo que todavía no se ha conseguido esa cultura deportiva que tanto le falta a México en varios deportes. Lo único que recibes a esa edad es el abrazo de los papás, son los motores, detalla la dorsista.

Así como otras deportistas, María Fernanda se despedirá con más logros en la cita centroamericana, en la que las mujeres siempre damos la cara, para seguir con su cosecha en los Panamericanos de Toronto 2015 y su tercera cita veraniega en Río de Janeiro, para cerrar con el Mundial de Guadalajara 2017.