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Mi sueño es ver triunfar a Brasil en el Maracaná, pero está difícil

Joao Bosco, primer aficionado en recoger sus boletos para el Mundial
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Los aficionados brasileños ya comenzaron a recoger los boletos que adquirieron por Internet. Sólo quedan entradas para 12 partidos de la Copa del Mundo y a la fecha se han vendido 2 millones 731 mil 906Foto Xinhua
 
Periódico La Jornada
Sábado 19 de abril de 2014, p. a13

Río de Janeiro, 18 de abril.

Un pedazo de cartulina anuncia que el Mundial 2014 está cerca. Los boletos comenzaron a ser entregados por la FIFA y los hinchas están ansiosos por los dos meses de espera que faltan para ver rodar el balón.

Joao Bosco, un mensajero de 67 años de edad que vive en la periferia de Río de Janeiro, fue el primero en llegar a la fila tres horas antes de que abriera el centro para retirar los dos boletos que compró de regalo de cumpleaños para su hija, Andrea.

Irán al España-Chile del grupo B, en el monumental Maracaná de Río, el mismo escenario donde su papá, hoy con más de 90 años, vio perder a la verdeamerelha la final de 1950 ante Uruguay.

Mi sueño sería poder ver ganar a Brasil en el Maracaná, pero está difícil, dijo Bosco, pues las entradas para la final ya tienen tiempo agotadas.

Más de 2.5 millones de boletos fueron asignados a través de Internet para la justa deportiva y desde este viernes se pueden retirar en todas las ciudades sedes, menos Brasilia y Porto Alegre, que abren hasta dentro de un mes. Los tickets también pueden ser recibidos por correo.

En el centro de Río de Janeiro había poca gente este viernes porque era feriado. La fila corta distaba del desorden registrado en el retiro de boletos en la Copa Confederaciones, el año pasado.

Al recibir las entradas –de fondo blanco y azul, con detalles en amarillo, verde y rosa– Bosco las colocó en el bolsillo de su chaqueta negra para protegerlas en el regreso a casa en autobús.

Vanderson Balbino (27), también carioca y dueño de una juguetería, llegó prácticamente al mismo tiempo que Bosco y al recibir sus ocho boletos la sonrisa no le cabía en el rostro.

Tengo entradas para cuatro juegos, dos en el Maracaná. Aún quiero ver un partido de Brasil y voy a intentar en las ciudades donde juega el equipo, dijo Balbino. Hasta ahora irá a juegos en Fortaleza y Manaos, además de Río.

Roman Devit (30) también llegó temprano y era el tercero en la fila. Viajó desde su natal Córdoba (Argentina) para buscar los boletos y pasar el asueto de pascua en Río. Leía un libro al esperar bajo el sol.

Seguirá a la albiceleste, comenzando en Río de Janeiro, frente a Bosnia (15 de junio, grupo F).

Su sueño es una final Argentina-Brasil: Lo único es que cuando ganemos, tendrán que sacarnos en helicóptero, bromeó.

El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, informó esta semana que sólo quedan entradas para 12 partidos del Mundial, todos de la fase de grupos. En total, se vendieron hasta el momento unos 2 millones 731 mil 906 entradas.