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La oferta se enfoca al mantenimiento y no a la rehabilitación del tramo: Alfredo Hernández

Rechaza GDF propuesta del consorcio constructor para reabrir la línea 12
 
Periódico La Jornada
Domingo 13 de abril de 2014, p. 30

El Gobierno del Distrito Federal (GDF) rechazó la propuesta del consorcio constructor de la línea 12 del Metro, constituido por las empresas ICA, Carso y Alstom, por considerar que la oferta se enfoca más al mantenimiento que a la rehabilitación de 11 de las 20 estaciones que se encuentran cerradas.

El secretario de Obras y Servicios del DF, Alfredo Hernández García, explicó que la propuesta presentada se analizó en una mesa especializada, en la que participaron representantes del consorcio, del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, la contraloría general y la consejería jurídica, y ahí se tomó el acuerdo de rechazarla.

Entrevistado luego de participar en la jornada sabatina de Tu ciudad te re-quiere en la delegación Iztacalco, el funcionario precisó: El acuerdo de la mesa fue que se les regresara la carpeta para reconsiderarlo y que se seguiría con todos los lineamientos, los estudios y las pruebas de laboratorio que está llevando a cabo TSO (Triacaud Societé Organisé) para concluir con un programa de rehabilitación de la línea 12.

Hernández García aclaró que el objetivo principal es la rehabilitación de la llamada línea dorada, por lo que continuarán con los lineamientos que marque TSO.

Sobre el costo que tendrán los trabajos de rehabilitación, el secretario dijo que se tiene que esperar el resultado de los estudios y los lineamientos que está haciendo la empresa francesa para determinar qué acciones se deben hacer y costearlas.

Estimó que esto podría ser en un par de semanas más y reiteró que serán la consejería y la contraloría capitalinas las responsables de determinar quién y qué paga.

El consorcio constructor proponía al GDF contratar cuatro empresas e instituciones para poner en operación en junio la parte elevada –que comprende 11 estaciones del Metro, entre la terminal Tláhuac y Culhuacán–, la cual ayer cumplió un mes cerrada.

El consorcio aclaró que su propuesta no implicaba aceptar responsabilidad alguna en la problemática de la citada línea, e insistía en que ésta se debe a la falta de atención oportuna al fenómeno del desgaste ondulatorio acelerado.