Un cuchillo, una radiografía, cabello, anillos, figuras de papel, brasieres, ropa en una bolsa de plástico, tazas japonesas de té, una lavadora, una plancha, vestidos de boda, todos, como parte de historias rotas: familiares, amorosas, amistosas. Historias que rompió la muerte, la inseguridad en la pareja, el tiempo y que ahora son piezas de la colección del Museo de las Relaciones Rotas, fundado en Zagreb, Croacia, a las que se suman otras 120 historias y objetos recolectados en México y que se exhiben desde el miércoles en el Museo del Objeto del Objeto (MODO)

Todas son historias rotas y eso le da un ambiente peculiar a la exposición. Van a observar objetos de todas partes del mundo junto con las historias mexicanas, y descubrir que hay un sentimiento universal y la esperanza de volverse a enamorar, señalo Olinka Vistica, quien junto con Drazen Grubisic fundaron en 2006 el Museo de las Relaciones Rotas. Ambos realizaron la curaduría de las mil 502 historias mexicanas que se reunieron tras la convocatoria a participar en la muestra.

No es para nada una exposición depresiva, sino todo lo contrario: los objetos relatan historias de esperanza y compasión, y compartimos este sentimiento todos los seres humanos sin importar de dónde seamos, añadió Vistica.

El Museo de las Relaciones Rotas comenzó como una pequeña instalación y nunca me hubiera imaginado que llegaría a ser un museo, menos llegar hasta aquí. Hemos viajado a 20 países y 30 ciudades y jamás tuvimos una respuesta como la que tuvimos aquí. Nos dimos cuenta de que estamos en un país apasionado, comprensivo, donde el amor juega un papel importante.

La curadora y fundadora del museo se refiere al récord de historias que llegaron: mil 502, de las cuales 87 por ciento son de relaciones románticas y el resto familiares o de amistad. Hasta ahora el récord lo tenía París con 123 objetos. En México, tan sólo el primer día, se recibieron 210 registros de donación. Se seleccionaron 120 historias, de las cuales se exhiben 60 junto con las historias traídas por el Museo de las Relaciones Rotas, y el 23 de abril se intercambiarán por las historias que faltan, de acuerdo con Paulina Newman, directora del MODO.

El Museo de las Relaciones Rotas fue tan bien recibido porque la gente se enamora y sufre por igual. Las diferencias entre los países y las personas son más de naturaleza económica o política, porque en lo interno somos iguales, dijo el curador Drazen Grubisic, en la conferencia de prensa que se realizó en la Sala Margolín, la tienda de discos y libros que cerró en 2012 y ahora es un anexo del MODO, que funciona como foro cultural. Mantiene su nombre, porque compramos también los derechos, dijo a La Jornada, Bruno Newman, fundador del MODO y quien compró la sala para evitar que se convirtiera en antro.

De regreso a la exposición, los curadores coincidieron en que la selección de las piezas mexicanas fue difícil porque todas las historias eran interesantes y pueden agruparse en emociones o experiencias similares: encuentros cortos pero intensos, primeros amores, divorcios, aunque también hay historias que terminaron con la muerte, ya sea de la pareja o de algún familiar.

La exposición del Museo de las Relaciones Rotas termina el 8 de junio. El MODO se encuentra en la calle de Colima 145 en la colonia Roma. El horario es de miércoles a domingo de 10 a 18 horas. El precio de admisión es de 40 pesos para el público en general y de 20 pesos para Inapam, maestros y estudiantes, así como vecinos de la colonia Roma.