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Los dirigidos por José Luis Real mostraron un juego dinámico y con frecuentes llegadas

La afición retorna al Omnilife para presenciar la victoria de las Chivas

Omar Bravo, decisivo en la jugada del gol, fue sustituido por molestias en una rodilla

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Aldo de Nigris consiguió de pierna derecha la anotación que concretó el dominio chiva sobre Jaguares. Los de Guadalajara suman cuatro unidades, contra una de ChiapasFoto Jam Media
 
Periódico La Jornada
Lunes 13 de enero de 2014, p. 3

Guadalajara, 12 de enero.

Las Chivas se sobrepusieron a un titubeante arranque y lograron una presentación triunfal en el estadio Omnilife –que registró una buena entrada–, donde vencieron 1-0 a Chiapas con anotación de Aldo de Nigris, en partido que cerró el telón de la fecha 2.

El equipo de José Luis Real, en el que se presentó con aceptable actuación el zaguero Jair Pereira, llegó a 4 unidades, mientras que los visitantes se quedaron con un punto.

Al comienzo, el cuadro chiapaneco se mostró con más oficio de ataque. Merodeó la portería defendida por José Antonio Rodríguez con intentos de Lucas Viatri, William Paredes y Carlos Ochoa, y una vez rebasada la media hora de juego las Chivas por fin se manifestaron al frente, con un remate de Aldo de Nigris, el cual se fue ligeramente desviado, cerca del poste izquierdo.

Al minuto 36, el técnico visitante, Sergio Bueno, tuvo que sustituir al lesionado Juan Carlos Rojas y metió a César de la Peña, aunque el partido continuó con bajo perfil.

En la recta final del primer periodo, el Guadalajara cerró con intensidad, Jorge Enríquez realizó un disparo desde fuera del área que resultó desviado.

El segundo tiempo inició a tambor batiente, con los chiapanecos volcados al frente y los rojiblancos dispuestos a imprimir su singular velocidad y dinámica. Las llegadas hacia las metas resultaron precipitadas, los sureños, vestidos todos de verde limón, desplegaron seguidillas de pases, mientras que los tapatíos privilegiaron los largos servicios en busca de los punteros.

Al minuto 46 William Paredes recibió cartón amarillo por cometer falta sobre Carlos Fierro y al 58 de acción el Guadalajara tomó la delantera con la anotación de Aldo de Nigris.

Omar Bravo buscó rematar un centro proveniente desde la derecha de Rafael Márquez, el jugador sinaloense se estiró al máximo y logró cabecear, estrelló el balón contra el poste derecho y la pelota rodó hacia el centro, donde De Nigris remató con la pierna diestra.

Enfadado, Bueno reforzó su delantera, sacó a Carlos Ochoa e ingresó a Wilberto Cosme (61’) y más tarde completó sus relevos con la salida de William Paredes por Mauricio Romero (70’).

Cerca de la segunda anotación

Chivas tuvo una inyección anímica importante tras la anotación y estuvo cerca del segundo tanto al minuto 62, cuando Carlos Fierro robó el balón por la derecha, sacó un centro que Aldo conectó con la cabeza y estrelló en el larguero, en un segundo remate el delantero regio cruzó de más su envío, pero esa llegada terminó de encender las tribunas que entonaron cánticos de apoyo.

Omar Bravo pidió su cambio al sentir molestias en una rodilla, salió del campo rengueando al minuto 68, con paso lento y el dolor reflejado en el rostro. El Güero Real metió a Abraham Coronado.

El desconcierto en las filas visitantes fue notorio. Los chiapanecos intentaron recuperar la posesión del esférico, pero el Rebaño estaba desatado, desbocado y con ánimo de buscar más goles. Márquez Lugo recibió un largo pase, acomodó el balón con el pecho y sacó un zurdazo cruzado que pasó cerca de la portería defendida por Alfredo Frausto.

Al minuto 76 Real dio actividad a Ángel Zaldívar, quien entró por Rafael Márquez. Las Chivas continuaron imponiendo el ritmo de juego, se plantaron bien a la defensiva y cerraron los caminos a los intentos de los chiapanecos que se veían incapaces de hilvanar tres pases y sin piernas para seguir corriendo.

Poco después la fatiga también invadió a los anfitriones, en la recta final bajaron la velocidad, rotaron más lento el balón y dieron cierta oportunidad a los visitantes, pero los de Chiapas estaban fundidos, Wilberto Cosme tuvo una ocasión importante, sin embargo, sacó un disparo infame que no fue ni centro ni tiro a gol.