Lampedusa, 9 de octubre.

Con abucheos y al grito de asesinos, los habitantes de Lampedusa recibieron hoy al presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, y al primer ministro italiano, Enrico Letta, quienes visitaron la isla italiana frente a la cual murieron unos 300 inmigrantes indocumentads africanos la semana pasada.

Desde hace tiempo los isleños se quejan de que Italia y la Unión Europea (UE) los ha dejado solos frente a los miles de inmigrantes que llegan cada año a sus costas, provenientes de África y Medio Oriente. Italia ha exigido al bloque europeo que haga más para patrullar el Mediterráneo y ayude a los países fronterizos, que son los primeros en recibir a los indocumentados. Este drama es un drama europeo, insistió Letta, quien anunció funerales de Estado para las víctimas.

Barroso, acompañado por la comisaria europea de Asuntos Internos, Cecilia Malmström, rindió homenaje ante los féretros con los 302 cuerpos recuperados hasta este miércoles, de las entre 500 y 550 personas que viajaban en la embarcación, de las cuales 150 fueron rescatadas vivas.

Europa no puede mirar hacia otro lado ante tragedias como la muerte de cientos de inmigrantes africanos, que deben ser percibidas como un problema de toda Europa, dijo Barroso.

Luego de anunciar que la UE otorgará 30 millones de euros (40 millones de dólares) a Italia en fondos adicionales del bloque para ayudar a recibir y dar alojamiento a los refugiados, el funcionario europeo se comprometió a trabajar incansablemente para implementar una política de asilo en toda la UE y a fortalecer la agencia de vigilancia fronteriza, Frontex, con el fin de prevenir más tragedias.

Malmström también manifestó que los países miembros de la UE pondrán en marcha una amplia operación de seguridad y rescate de migrantes en el mar Mediterráneo, mientras Frontex anunció el desbloqueo de dos millones de euros adicionales para Italia.

Barroso reconoció, por otro lado, que Italia y otros países del sur de la UE con costas en el Mediterráneo, son los que tienen la peor carga de llegada de inmigrantes, en tanto que naciones del norte de Europa como Alemania, Gran Bretaña, Suecia y Bélgica son los que reciben la mayor parte de los solicitantes de asilo para que establecerse definitivamente.

Esos países recibieron 72 por ciento de las 330 mil solicitudes en 2012, mientras que Italia sólo recibió 16 mil, por lo que Barroso dijo que este país y Austria deberían compartir más la carga.