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El Gobierno del DF y la empresa privada reconocen que nunca firmaron un contrato

La Autoridad del Centro Histórico me pidió el análisis de El caballito: Marina

Se interpuso una denuncia de hechos contra quien resulte responsable, indica Héctor Serrano, titular de la Secretaría de Gobierno

La Procuraduría General de Justicia y la Contraloría capitalinas serán las que determinen si hubo negligencia, señala el jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera

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Alejandra Moreno Toscano, coordinadora general de la Autoridad del Centro Histórico y Héctor Serrano, titular de la Secretaría de Gobierno del Distrito Federal, ayer, durante la conferencia de prensa sobre la restauración de la escultura El caballitoFoto La Jornada
 
Periódico La Jornada
Jueves 10 de octubre de 2013, p. 3

La adjudicación para realizar el “Servicio para la Restauración y Rehabilitación del Monumento Ecuestre a Carlos IV de España conocido como El caballito” se otorgó a Arturo Javier Marina Othón por parte de la Secretaría de Gobierno del Distrito Federal (GDF) por haber cumplido con los requisitos solicitados, asegura el propio implicado en la polémica restauración de la obra de Manuel Tolsá.

En un comunicado enviado a La Jornada, Marina explica que el análisis para determinar el estado que guardan los monumentos y esculturas del Centro Histórico, me fue encargado por la Autoridad del Centro Histórico.

Para certificar sus palabras, acompañó su escrito por un oficio firmado el 6 de septiembre por el director de Recursos Materiales y Servicios Generales de la Secretaría de Gobierno del GDF, Alejandro García Aragón, en el cual le confirma la adjudicación como resultado del análisis económico y se le indica a dónde acudir para el pago de las facturas correspondientes.

Los permisos, deber de la autoridad

Arturo Javier Marina confirma en su comunicado a la prensa que nunca se firmó un contrato. El tiempo pactado para la realización de los trabajos sería de dos meses, septiembre y octubre, y el monto autorizado sólo fue de 240 mil pesos, IVA incluido. Debido a la premura para entregar concluidos los trabajos, a la pobre disponibilidad económica, a la falta de anticipo (me fue negado el 50 por ciento), a la confianza por los anteriores trabajos realizados, se me indicó en la Secretaría del Gobierno del DF que no me sería solicitada fianza alguna.

Argumenta que correspondía a las autoridades solicitar y obtener previamente los permisos ante el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), esta obligación no se aplica a los prestadores de servicios.

En lo relativo a los métodos, técnicas, elementos químicos y maquinaria empleados para la restauración de esculturas en bronce, continúa Marina, “demostraré en su debida oportunidad y ante los tribunales y autoridades correspondientes que estos procedimientos no causan ‘daños irreparables a las esculturas’. Los daños que presenta la obra son añejos y no producto de nuestra intervención”.

Ayer por la mañana, el titular de la Secretaría de Gobierno del Distrito Federal, Héctor Serrano Cortés, afirmó en rueda de prensa que la empresa Marina Restauración de Monumentos inició los trabajos de mantenimiento de la escultura El caballito, sin un contrato de por medio, motivo por el cual se interpuso una denuncia de hechos contra quien resulte responsable, tanto a nivel de servidores públicos como de particulares.

Serrano Cortés habló un día después de conocerse el dictamen elaborado por especialistas del INAH, los cuales confirmaron que Arturo Javier Marina causó daños irreversibles a la escultura durante los dos días que trabajó en ella (17 y 18 del pasado septiembre), al pretender limpiarla con ácido nítrico al 30 por ciento.

El secretario de Gobierno capitalino estuvo acompañado de los titulares de la Autoridad y Fideicomiso del Centro Histórico, Alejandra Moreno Toscano e Inti Muñoz Santini, respectivamente. Explicó que los trabajos de restauración fueron adjudicados de manera directa a Marina. Sin embargo, éste inició labores sin haber concluido el trámite administrativo que incluye la autorización del INAH y por tanto de las autoridades locales.

Detalló que para realizar un trabajo de este tipo, antes se debe cumplir con una serie de trámites como depositar una fianza, la cual nunca se exhibió, ni hubo firma de contrato. No sé qué pasó, pero nunca contó con la autorización para realizar el trabajo, reiteró el funcionario.

Por fincar responsabilidades

En otro acto, el jefe de Gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera Espinosa, señaló que serán la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) y la Contraloría General del GDF las que determinen si hubo negligencia en este caso y aseguró que su administración actuará con firmeza en ese caso.

Alejandra Moreno Toscano, Autoridad del Centro Histórico, dijo que si bien parte de la pátina de la obra de Manuel Tolsá presenta daños irreversibles, la escultura como tal no tuvo ninguna afectación. En el caso de la pátina, agregó la historiadora, ésta va a ser restituida, es lo que va a hacer el INAH, mientras en el basamento se va a hacer una limpieza muy profunda, para lo cual se contará con un equipo pluridisciplinario, por lo que no hay nada que nos lleve a una situación de no remediación del tema.

Héctor Serrano manifestó que la responsabilidad administrativa en este caso es de la dependencia a su cargo, en coordinación con el Fideicomiso Centro Histórico y con la Autoridad del Centro Histórico, pues esta última depende de forma directa de la Secretaría de Gobierno.

No obstante, insistió en que la responsabilidad recae en la empresa Marina Restauración de Monumentos, toda vez que no contaba con la autorización del INAH para iniciar sus trabajos.

Luego matizó: Si existiera alguna irregularidad de algún funcionario, eso tendrán que determinarlo la PGJDF y la Contraloría.

La Autoridad del Centro Histórico es órgano independiente creado en 2007 por el entonces jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, con la finalidad primordial de rehabilitar la parte oriente del primer cuadro del Distrito Federal, así como recuperar el espacio público.

El Fideicomiso del Centro Histórico se instituyó en 1990 como una entidad privada y concluyó sus actividades en 2001. En febrero de 2002 se reactivó y pasó a ser parte de la administración pública del Gobierno del Distrito Federal para llevar a cabo acciones y programas para revitalizar el Centro Histórico, al promover, gestionar y coordinar ante los particulares y las autoridades competentes la ejecución de acciones, obras y servicios que propicien la recuperación, protección y conservación de dicha zona.

Por su parte, la presidenta de la Comisión de Cultura y Cinematografía de la Cámara de Diputados, Margarita Saldaña, informó que la próxima semana será citada la titular del INAH, María Teresa Franco, para que explique ante los legisladores el dictamen y los resultados en torno a los daños ocasionados a la escultura ecuestre de Carlos IV.

En entrevista, al finalizar el encuentro Estímulos a la creación, promoción y difusión artística, que se realizó este miércoles en el Congreso, la legisladora dijo que los mexicanos queremos saber quiénes son los responsables y qué vamos hacer, porque se trata de un monumento patrimonio de la nación.

Calificó el asunto de grave, porque pareciera que alguien que tiene el recurso lo puede utilizar sin acatar las reglas.

Reconoció que hace falta revisar las sanciones que contempla la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos.