Durante los pasados 12 años el tricolor criticó que se había empanizado la cancillería
una diplomacia gris
Tras 15 días en el cargo, el secretario José Antonio Meade no ha anunciado cambios
Miércoles 12 de diciembre de 2012, p. 14
Aun cuando los priístas criticaron a lo largo de 12 años la pérdida del liderazgo de México en el extranjero
y afirmaron que el país tenía una diplomacia gris
, a dos semanas de que el tricolor recuperó la Presidencia de la República la única dependencia que no ha tenido cambio alguno, más allá del relevo de su titular, es la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Desde todos los frentes, el priísmo acusó a los gobiernos de Vicente Fox y de Felipe Calderón de empanizar
a la cancillería al designar en las embajadas y consulados más importantes, así como en las subsecretarías de la SRE a militantes de su partido, no obstante, a la llegada del ex titular de la Secretaría de Hacienda en el sexenio pasado, José Antonio Meade Kuribreña, a la cancillería, las posiciones más relevantes se mantienen en las mismas manos.
Aunque ha trascendido que el embajador de México en Estados Unidos, Arturo Saruhkán, ha empezado a despedirse
y aquellos enviados a París, Madrid, Gran Bretaña o Italia, hasta los consulados de Los Ángeles, Chicago o Denver, esperan su relevo y en el mejor de los casos, su traslado a otro sitio, lo cierto es que desde el primero de diciembre todo ha sido especulación en la sede de la SRE, como el posible nombramiento de la ex dirigente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Beatriz Paredes, en alguna embajada.
Algo similar sucede en las oficinas centrales en las que todo sigue igual. Desde las subsecretarías y direcciones generales hasta la oficina de comunicación social, no han habido cambios. Quienes conocen al nuevo canciller, destacan que su criterio es conocer el desempeño de los funcionarios y de hacer pocos cambios.
De acuerdo con un estudio del investigador Alejandro Acosta, en los pasados 12 años aproximadamente 35 por ciento de las representaciones de México en el exterior fueron asignadas a miembros o simpatizantes del entonces partido en el poder.
Un ejemplo es la embajada de México en España. Estuvo a cargo de Gabriel Jiménez Remus, a quien sucedió Jorge Zermeño Infante y después Francisco Ramírez Acuña. Caso similar a la representación diplomática en El Vaticano, que ocuparon Luis Felipe Bravo Mena, sustituido por Federico Ling Altamirano.
Canadá es otro caso emblemático. En los primeros años del foxismo fue designada a esa embajada Teresa Segovia de Madero, ex alcaldesa de San Pedro Garza García, a quien siguió el ex secretario particular de Fox, Emilio Goicoechea Luna. Posteriormente fue nombrado Francisco Barrio Terrazas, ex gobernador de Chihuahua.
Mientras que en Cuba fue nombrado Gabriel Jiménez Remus, tras un periodo de ausencia en la titularidad de la embajada por suspensión de negocios
.
Para la embajada en Gran Bretaña fue nombrado Eduardo Medina-Mora Icaza, ex titular de la Procuraduría General de la República, mientras que en China fue nombrado Jorge Guajardo González, contra quien el comité municipal del Partido Acción Nacional (PAN) en San Pedro, Nuevo León, promovió su expulsión por adeudar cuotas de partido.