Opinión
Ver día anteriorViernes 30 de noviembre de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 
Penultimátum

Simbiosis de la jerarquía católica con el poder Ejecutivo

D

iversos especialistas han señalado los estrechos vínculos que existen entre la jerarquía católica mexicana y quien encabeza el Poder Ejecutivo Federal que mañana comienza su sexenio.

Todo indica que el clero hará todo lo posible para obtener las reformas que desea en el campo de la libertad religiosa y la educación pública. Igualmente, para impedir que en México se aprueben leyes que garanticen a las mujeres su derecho a decidir en asuntos que le son propios. O atajar cualquier nuevo intento de legislación que proteja el matrimonio entre personas del mismo sexo, como ya es una realidad en la capital del país.

Buscarán regresarnos al siglo XIX sin recurrir a la furia pública que otra jerarquía, la de Uruguay, mostró cuando en el Senado de ese país se aprobó la ley que despenaliza el aborto. Varios legisladores católicos respaldaron con su voto la medida, con la que está de acuerdo la mayoría de los ciudadanos de ese país.

Como castigo, los legisladores católicos quedaron excomulgados automáticamente, según anunció la Conferencia Episcopal, porque esa aprobación es un retroceso en materia de valores humanos y contraria a los conceptos eclesiásticos.

La Conferencia agregó que los excomulgados no podrán participar de los sacramentos de la Iglesia. La respuesta de los legisladores católicos no se hizo esperar: se trata de un disparate, pues nadie les puede prohibir asistir a un oficio católico en caso de que deseen concurrir.

Otro amigo de la jerarquía católica de su país es el jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Mauricio Macri. El también próspero empresario vetó la ley del aborto que la legislatura porteña aprobó el pasado septiembre y que tuvo el respaldo de la Corte Suprema.

Debido al veto, volverá a funcionar el protocolo firmado poco antes por el área de salud de la ciudad, que impone mayores restricciones para que las mujeres accedan al aborto en los supuestos permitidos por la ley: riesgo para el feto o para la madre y violación.

Está probado que una ley del aborto restrictiva perjudica a las mujeres de las clases menos favorecidas, que no pueden costearse el mismo en una clínica privada.

En el caso de la violación, Macri se opone a que las embarazadas menores de edad tengan acceso al aborto sin necesidad de autorización de sus padres o tutores. Pero como han hecho ver los estudiosos del tema, la mayoría de violaciones que sufren las menores tienen su origen dentro de la familia, lo que en muchos casos hace imposible conseguir esa autorización.

Macri vetó la ley con la sotana encima, fue el comentario de uno de los legisladores que aprobaron la ley en favor del aborto. En México los políticos y funcionarios que claman contra los derechos de la mujer, también.