A dos meses de iniciarse el conflicto entre la empresa minera canadiense Excellon Resources y los ejidatarios de La Sierrita, en Durango, y la sección 309 del sindicato nacional minero, no hay visos de solución porque las autoridades de la Secretaría de Gobernación y estatales han excluido de las pláticas a los trabajadores mineros afectados, denunciaron Jorge Luis Mora, secretario general de la referida sección, y David Espinoza, presidente del comisariado ejidal de La Sierrita.

En entrevista, Espinoza advirtió que los 127 ejidatarios propietarios de los predios ya iniciaron una demanda de rescisión del contrato de arrendamiento firmado con Excellon, por incumplimiento de las cláusulas convenidas. Además, la empresa inició la explotación de yacimientos de oro en El Rincón del Caído, terreno no considerada en el contrato.

La rescisión del contrato se debe a que Excellon omitió construir una planta tratadora de agua para eliminar los residuos tóxicos generados por la actividad minera, y entrega el líquido contaminado a otra empresa para el riego de parcelas de maíz.

La trasnacional había acordado que los ejidatarios se harían cargo del tratamiento de las aguas, pero ahora argumenta que no es posible porque no tienen los permisos respectivos, los cuales entregó la Comisión Nacional del Agua a la empresa Alesa.

Otra situación de riesgo, refirió Mora, es que afuera de la boca de la mina La Platosa, la única que existe para ingresar y salir, hay depósitos de pólvora cercanos a cables de alta tensión y a tuberías de extracción de agua y de aire comprimido, lo cual puede provocar un fatal accidente.

Excellon incumplió también al entregar a otra empresa el traslado del mineral, pese a que se había acordado concesionarlo a los ejidatarios, así como la administración y servicio de un comedor.

El contrato de ocupación temporal de los ejidos de La Sierrita, en el municipio de Tlahualilo, Durango, se firmó con Excellon de México en 2008.

Espinoza y Mora comentaron que el conflicto laboral se ha complicado con la trasnacional por la decisión de 18 ejidatarios y sus hijos, que también trabajan en La Platosa, de afiliarse al sindicato nacional minero que dirige Napoleón Gómez Urrutia. Además, la empresa creo dos sindicatos fantasma para evitar la titularidad del contrato a la sección 309 y dividir a los trabajadores.

Los representantes de ejidatarios y mineros destacaron que las autoridades de Gobernación y estatales sigue la misma táctica de Excellon (que impide la entrada a La Platosa de los trabajadores de la 309), ya que nos impiden ingresar a la mesa de negociación en Bucareli, con el argumento de que sólo pueden negociar los ejidatarios.

Los ejidatarios y mineros denunciaron también que provocadores del Sindicato Minero Napoleón Gómez Sada, que dirige Carlos Pavón, llegaron armados con palos y piedras al plantón pacífico en que permanecen ejidatarios de La Sierrita y trabajadores de la sección 309, en demanda del respeto a sus derechos humanos.