Al menos cuatro de los jóvenes asesinados el pasado 5 de mayo en Santa María Aztahuacan, en la delegación Iztapalapa, tienen parentesco entre sí, y sus familias son propietarias de microbuses de transporte público, informaron fuentes de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF).

Entre éstos se encuentra José Pedro Espinosa Chora, único sobreviviente, quien continúa delicado, aunque su estado de salud evoluciona favorablemente, por lo que el Ministerio Público está a la espera de tomarle declaración.

Las fuentes consultadas señalaron que el testimonio del muchacho de 23 años es fundamental para conocer cómo ocurrieron los hechos, pues además de la versión del enfrentamiento entre los mismos jóvenes afectados hay otra, en la que se señala que podrían haber sido ejecutados.

Pugnas familiares, posible móvil

Respecto del móvil, autoridades de la dependencia informaron que una de las hipótesis es que se trata de pugnas familiares.

Subrayaron que hasta la fecha a ninguno de los involucrados se les ha conocido antecedentes penales.

La mañana del pasado sábado, Espinosa Chora se encontraba con Carlos Josimar Araujo Espinosa, Patsy Monserrath Caudillo Espinosa, y una joven de 14 años, todos ellos familiares entre sí, además de Víctor Manuel García Falcón, Érick Hernández Silva y Adán Hernández Cruz, en la esquina de las calles 20 de Noviembre y Ejército Nacional, donde ocurrió una balacera.

Las primeras versiones apuntan a que se trató de un enfrentamiento a balazos; sin embargo, declaraciones recabadas en la averiguación previa señalan que los afectados estaban ingiriendo bebidas embriagantes cuando dos sujetos llegaron y les dispararon en varias ocasiones.

En los testimonios se refiere que los jóvenes se encontraban en una fiesta en un domicilio donde se presume que hay venta de drogas al menudeo, donde tuvieron un conflicto con los organizadores de la misma.

Hasta la fecha está pendiente el peritaje de mecánica de hechos, para el cual se espera que hoy se realice una reconstrucción que permita tener datos respecto de cómo ocurrieron los asesinatos.